Por Victoriano Martínez
Cuando el ejercicio de la política es inferior a la calidad y el mérito que debe tener o no corresponde a sus circunstancias, el denigrante espectáculo que resulta exhibe tal decadencia que cuando parecería que no se podría caer más bajo, como ocurrió en el proceso electoral 2020-2021, los politiqueros sorprenden con actos recargados de cinismo.
Al chapulineo interpartidista durante las precampañas y campañas previas a la elección de junio de 2021 le siguió un innovador post-chapulineo incentivado por un gobierno que comenzó por empatar la estructura del DIF estatal y la Secretaría de Desarrollo Social y Regional con la estructura electoral para después reclutar a alcaldes a las filas del PVEM.
Una conversión convenenciera –¿o bajo presión?– que comenzó el 13 de diciembre de 2021 con 11 alcaldes que se adhirieron al PVEM.
“Estamos con todo el ánimo de unirnos con el señor gobernador y con las posibilidades que, a mi bello municipio, Aquismón, le vaya bien”, fue la justificación que dio Cuauhtémoc Balderas, alcalde de ese municipio.
Ni mencionó por qué declinó a la plataforma de Redes Sociales Progresistas que fue por la que votaron el 10 mil 94 electores que votaron en junio de 2021 en Aquismón, ni por qué adoptó la plataforma del PVEM que apenas obtuvo el 3 mil 465 de los votos emitidos.
Ni plataformas comprometidas con los electores ni convicciones de partido han contado en la traición de los alcaldes a sus electores, pues el ánimo es unirse “con el señor gobernador y con las posibilidades” que les representa.
Una lógica ante la que ahora aparece un nuevo actor aparentemente con mayores posibilidades y, por tanto, al que ahora hay que unirse: Morena, al que se afiliaron tres alcaldes del Altiplano. Es de suponer que en teoría irse al partido de la Cuarta Transformación no los confrontará con el gobernador Ricardo Gallardo Cardona, que se dice defensor de la 4T.
¿Y si esto fuera un avance más de las conveniencias electoreras en las que ya sólo falta que lo que hoy se pinta de verde se tenga que comenzar a pintar de guinda?
Francisco Olguín García, alcalde de Villa de Guadalupe, da la espalda a los mil 886 electores que votaron por su plataforma del Partido Encuentro Social, para afiliarse a Morena, que apenas recibió 228 votos en ese municipio.
En el colmo del cinismo, Jorge Armando Torres Martínez, de Villa de la Paz, y Howard Francisco Aguilar Vergara, de Cedral por segunda vez le dan la espalda a quienes los votaron. El primero a los 897 votantes que optaron por el PANAL, para primer irse con los 106 que votaron por el PVEM y ahora con los 222 que votaron por Morena.
En el caso de Cedral, Aguilar Vergara dio la espalda a los 2 mil 855 que votaron por PMC para afiliarse con los mil 955 que votaron por el PVEM y ahora alinearse con los 806 que votaron por Morena
Una actitud politiquera en la que lo que menos importa es responder al interés de la población, a la que siempre están dispuestos a engañar con tal de que, cuando acuda a las urnas, los considere la opción a elegir.
Un engaño para el que, ya en los cargos, se arman de aparatos de publicidad que asedian a la población con propaganda que magnifica obras que son su obligación realizar, pero por las que pagan inmensas cantidades en gacetillas que se presentan como información periodística en medios que se prestan a hacerlo.
Otro colmo del cinismo: Gallardo Cardona y el alcalde Enrique Galindo Ceballos se dicen víctimas de campañas negras desde páginas Web falsas, y por parte de “pseudo-reporteros”, quienes elaboran “páginas noticiosas falsas”, cuando su propaganda a quien asedia con información engañosa es a la población… y con los impuestos que de ésta reciben.
Ambos lanzan una acusación general sin aportar datos específicos. El mandatario estatal prevé que para les próximas campañas aumentarán los casos.
“Se va a intensificar conforme lleguen las campañas políticas, pero ahorita ni hay (campañas), entonces que estupidez con estar haciendo portales o que haya pseudo-reporteros atacando”, expresó, cual aval de que en ese periodo todo se vale, hasta las noticias falsas.
Quizá tenía en mente el “reportaje” publicado en TV Azteca en transmisión nacional el 16 de marzo de 2018, pagado con recursos públicos, para reforzar su presencia como aspirante a diputado federal previo a lograr esa postulación por la alianza Por México al Frente, integrada por el PAN, el PRD y el PMC. Sí, Gallardo Cardona también chapulineó convenencieramente.
Galindo Ceballos señala 20 páginas falsas que le hacen campaña negra. Quizá sea buen momento de que explique cómo usa la publicidad en 123 medios a los que ha realizado mil 29 pagos, entre octubre de 2021 y abril de 2022, por 89 millones 718 mil 257.59 pesos.
Gallardo Cardona tendría que explicar por qué oculta la información sobre su gasto propagandístico en medios en la Plataforma Estatal de Transparencia.
Si tan preocupados están por que se respete el derecho de la sociedad a la información, podrían comenzar por no derrochar recursos públicos en promoción personalizada disfrazada de notas periodísticas… y bajarle un centenar de rayas, o muchísimas más, a su cinismo.