Por Victoriano Martínez
“Esta es la primera denuncia de muchas. La ciudadanía esperaba que actuáramos y aquí están los hechos, luego de conformar las carpetas, los expedientes”.
La expresión es del alcalde Xavier Nava Palacios.
Permanece en la línea de mantener altas las expectativas sobre las acciones de su administración en el combate a la corrupción y a la impunidad.
Pero sólo es la primera de muchas. El propio alcalde pone el foco en las que vienen.
Durante 137 días se conformaron carpetas y expedientes que, como suelen decir los expertos en planificación, si el periodo de preparación, de afilar el hacha, fue largo, lo que sigue es que comiencen a caer los resultados como pinos.
Los elementos para esta primera denuncia estaban dados desde el 21 de diciembre, hace 56 días. La sesión de Cabildo de aquella fecha fue para cumplir la orden de una juez federal que dejaba acreditados la violación a un amparo y el atentado contra el patrimonio ecológico de la ciudad.
La defensa de los bienes inmuebles del Ayuntamiento sigue pendiente.
La denuncia no aborda la situación de que el predio en cuestión fue escriturado a nombre del ex alcalde Ricardo Gallardo Juárez y presuntamente lo vendió a una empresa antes de cambiar el uso de suelo.
Es de esperarse ahora una presentación de denuncias prácticamente en cascada, entre las que habrá de encontrarse el caso de despojo por parte del ex alcalde de un terreno dentro de una propiedad municipal.
Resulta significativo que la primera denuncia se haya presentado ante la Fiscalía General de la República (FGR) y a la semana siguiente de la que registró el anuncio de la Fiscalía General del Estado (FGE) en el que se declara incompetente, un año después, para conocer del caso Sandra Sánchez Ruiz.
Para estas fechas, ese caso de la compra fantasma de medicamentos ya tendría que haber estado presentado ante la FGE por el Ayuntamiento, según lo anunciado por José Mejía Lira hace justamente tres semanas.
Hoy pueden decir que no se hizo porque se vieron obligados a revisar la competencia para acudir a la ventanilla adecuada.
Una circunstancia –determinar ante qué instancia deberá presentarse cada expediente preparado durante los 161 días que lleva la administración– que no debe ser tomada para dilatar aún más las acciones sobre las que más expectativas han creado.
Porque si se afirma que “es la primera denuncia de muchas”, lo más lógico es esperar que a golpe de esas muchas denuncias presentadas en los próximos días se rompa, por fin, esa tradición de encubrimiento e impunidad entre una administración municipal y la que le sigue.