Abelardo Medellín
La manera en que la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) rentó el terreno localizado en la colonia Lomas Cuarta Sección que será utilizado para construir una plaza comercial y un centro deportivo denominado Distrito Santa Fe, deja ver que en este caso las cosas “se hicieron mal” y las autoridades universitarias no se pueden “decir sorprendidas”, afirmó el vocero de la organización Ciudadanos Observando, Guadalupe González Covarrubias.
La semana pasada Astrolabio reveló el proyecto que la empresa Distribuidora VEM, planea construir sobre el terreno de la UASLP, el cual consiste principalmente en una plaza comercial, con algunos despachos deportivos.
Ante la publicación de la noticia, el rector de la UASLP, Alejandro Zermeño Guerra, negó que el terreno se vaya a convertir en un centro comercial e insistió en que será un centro deportivo para las y los universitarios.
Al respecto del tema, el activista González Covarrubias afirmó que las autoridades universitarias no pueden negar la versión de que el espacio será un centro comercial, pues así es como lo promociona la propia empresa en sus redes sociales.
“La universidad no nos puede decir que fueron sorprendidos porque los terrenos son de la universidad, cuando firma la universidad y todos los integrantes del Consejo (…) les debieron haber presentado el croquis, el proyecto, las especificaciones, la proyección que iban a tener”, comentó.
El vocero de Ciudadanos Observando apuntó que las recientes explicaciones del rector sobre este arrendamiento son vagas y la ciudadanía necesita que la UASLP publique efectivamente los documentos relativos al arrendamiento del terreno para revisar si los comentarios de Zermeño Guerra son ciertos.
“Nosotros no le creemos al rector y no al rector por ser quien es, ni al rector ni a cualquier mandatario, no queremos que salgan a dar discursos, queremos que lo acompañen con pruebas, con documentos, con croquis, con planos, con especificaciones. Eso es lo que le tienen que dar a conocer a la sociedad, que den a conocer el contrato porque no cuadra lo que proyecta la empresa, con lo que nos está dando la Universidad; inclusive el servicio que le van a dar supuestamente a la Universidad y los cajones que le van a dar a los estudiantes universitarios, pues es de risa, es de risa para lo que nos platica”.
González Covarrubias comentó que, en este caso de la renta del terreno, parece que “las cosas se dieron al revés”, pues primero se dio la aprobación del arrendamiento y luego se enteró la población del tema, cuando lo ideal hubiera sido que la máxima casa de estudios primero enterara a la población de su decisión y luego buscara ofrecerlo en renta como lo hizo.
Al margen del tema, González Covarrubias mencionó que llama la atención que la Universidad realice este tipo de maniobras para arrendar un terreno, informe públicamente que necesita recursos como lo ha hecho a través de medios de comunicación y por otro lado se niegue a ser auditada por las entidades del Estado.
“Cuando no hay transparencia, siempre hemos llegado a la conclusión de que hay corrupción; entonces, si la Universidad inclusive se andan amparando para no rendir cuentas, aquí nos genera un nuevo problema. Están diciendo que necesitan recursos, pero si no quieren que se les auditen, ahí hay otro problema”, comentó.