Ciudad de México (03 de febrero de 2016).- El día de pago llegó, pero tú simplemente no pareces emocionarte como todos los mortales de todo el mundo.
Si esto te pasa, sólo puede existir una razón y es que has entrado en un círculo vicioso en el cual trabajas para pagar deudas, y pides más préstamos para sobrevivir la siguiente quincena, porque esta tampoco te alcanzará.
Si ya intentaste reducir al máximo tus gastos innecesarios, pero ni así la libras, sería interesante que pusieras atención en tus hábitos, estamos seguros que ahí puedes encontrar varios porqués a tu situación.
Piggo, la plataforma de inversión y ahorro, ha detectado algunos que pueden ser la causa de que el dinero se te vaya de las manos, chécalos y modifica alguna de estas conductas.
- El caos: Si nunca sabes en qué se te va el dinero, es momento de ponerte estricto y comenzar por un buen presupuesto que te indique tus prioridades, y también para que sepas cuáles son tus gastos y por fin sepas por qué el dinero se te va como agua.
- Sin límites: A veces quisiéramos no tenerlos, pero hablando de dinero, éste es limitado y es necesario que los pongas. Los límites te ayudan a establecer puntos de advertencia que te pueden ahorrar problemas financieros, ya que a veces tus gastos te llevan a pellizcar un poco de tu ahorro o los financias con la tarjeta de crédito. A la larga esta situación es insostenible, hace que la quincena parezca más lejana en días y más corta en dinero.
- Los meses sin intereses: Son excelentes aliados cuando quieres algo pero no tienes liquidez o es más fácil pagarlo en plazos, sin embargo, se pueden convertir en un arma de doble filo cuando se empiezan a acumular. Lo único que hace este montón de pendientes financieros es disminuir aún más tu pequeño ingreso. ¡No permitas que te pase! Y la próxima vez que vayas de compras deja la tarjeta en casa.
- El aburrimiento: No sólo te saca de balance, también acaba costando muy caro, y es que se convierte en un disparador de ciertas conductas nada buenas para tu cartera. Por ejemplo: Imagina un día que no tienes nada que hacer, te vas de compras nada más porque sí y al final sigues igual de aburrido pero ahora sin dinero. Evita estas situaciones y busca actividades que no te dejen en bancarrota.
- La pereza: Aunque no lo creas representa una fuga para tu dinero, la flojera de no caminar unas cuantas cuadras para llegar a tu trabajo, de no cocinar, de no cuidar tu salud, todo ello sólo puede acarrear el ya tradicional ” si yo hubiera”, pero aún estás a tiempo, termina con este círculo vicioso.
Fuente: Dinero en Imagen.