Ciudad de México, (30 de marzo).- En materia de tecnología, las predicciones siempre desatan todo tipo de visiones desbocadas que parecen más relacionadas con el cine y la literatura de ciencia ficción que con las posibilidades reales que pueden llegar a proporcionar los avances técnicos. Sin embargo, ello no impide que periódicamente aparezcan especulaciones y adelantos de todo aquello que nos espera dentro de algunos años o décadas.
Este fin de semana la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa (DARPA, en inglés) dio a conocer su más reciente visión del futuro. Sin embargo, no se trata de una estimación cualquiera.
A medida que el ojo tecnológico clarividente de la agencia perteneciente al Departamento de Defensa de Estados Unidos ha tenido de todo a su alcance -desde el lanzamiento de aviones de combate de sigilo al nacimiento de internet- se puede decir que cuando predicen el futuro, lo más probable es que ellos mismos sean los artífices para que ese futuro se haga realidad.
Según dio a conocer la revista Popular Science, en el más reciente reporte de DARPA hay cuatro tecnologías futuras que destacan y no se trata de avances que deban tomarse a la ligera. De hecho, podrían llegar a verse en los campos de batalla en los próximos años.
1. Hombre y máquina
DARPA es conocida por buscar frecuentementecerrar la brecha entre los humanos y las máquinas. La agencia ya ha tenido cierto éxito con implantes neuronales y prótesis, de modo que planean construir a partir de estos logros. El gráfico anterior muestra el programa de Prescripciones Eléctricas, también conocido como ElectRx, cuyo objetivo es crear dispositivos implantables en miniatura que monitoreen la interfaz entre los nervios y los órganos. Los dispositivos podrían monitorear la salud de un veterano y, cuando sea necesario, estimular esos órganos para que hagan mejor su trabajo. podría decirse que es como un marcapasos, sólo que para más órganos además del corazón.
2. Drones al acecho
“Underwater Falling Payloads” se trata de un programa de la agencia para receptáculos de drones submarinos que yacen de manera latente y ocultos en las profundidades del mar durante años, listos para lanzarse hacia el cielo y quedar a disposición y control de las fuerzas militares. La atención se centra actualmente en cargas no letales, pero cuando la premisa básica es “ocultar robots militares bajo el agua” tal vez resulte una buena idea mantenerse a distancia, sobre todo tomando en cuenta que alguien puede retomar el mismo principio para colocar misiles secretos, por ejemplo.
3. Satélites lanzados desde un avión
Para aquellos a los que la idea de mantener drones bajo el mar resulta poca cosa, ¿qué les parece entonces el lanzamiento de satélites desde aviones de combate directamente hacia el espacio? En esto trabaja el programa Airborne Launch Assist Space Access (ALASA) que podría ahorrar varios millones de dólares de costo en los lanzamientos de satélites pequeños, al poner a estos en los cohetes que llevan consigo los jets de combate existentes. Podría parecer una posibilidad remota, pero la verdad es que está a la vuelta de la esquina con la segunda fase de la prueba establecida para terminarse este mismo año.
4. Misiles de larga distancia
A veces los nexos entre la tecnología y las aplicaciones militares suelen acostumbrarnos a nexos complicados, como el desarrollo de un nuevo material sintético para mejorar la tecnología computacional. Sin embargo, también hay veces en que la relación suele ser simple y al punto. Así sucede con los Misiles Anti Barcos de Largo Alcance (LRASM, por sus siglas en inglés). El nombre lo dice todo y su objetivo tampoco tiene más rodeos: hay embarcaciones que se encuentran a mucha distancia para ser objetivos accesibles, por lo que se requiere un misil especial para llegar hacia ellas. El programa inicio en 2009 y DARPa espera que los militares lo tengan en sus manos para ser usado en 2018.
Fuente: SinEmbargo