Por Victoriano Martínez
¿Qué tan interesado está el Ayuntamiento de San Luis Potosí en que los habitantes de la ciudad participen en la consulta sobre el Programa Municipal de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano (PMOTDU) y el Programa de Desarrollo Urbano de Centro de Población (PDUCP)?
Planteado de otra manera: ¿qué tan interesado está el Ayuntamiento de San Luis Potosí en que los habitantes de la ciudad participen en la consulta para definir la ciudad que quieren en el futuro, incluida, entre otras cosas, la preservación de la Sierra de San Miguelito, esa que tanta preocupación causó en los meses de abril y mayo del año pasado?
Después de 24 días de abierta la consulta para el PMOTDU, y de 15 días de la del PDUCP, el interés mostrado por el Ayuntamiento se limita a lo que por obligación legal tiene que hacer: la publicación de las dos convocatorias en el Periódico Oficial del Estado y, el 24 de diciembre, un anuncio en la página 11 del periódico El Sol de San Luis y una gacetilla en la página 6 de San Luis Hoy.
El artículo 69 de la Ley de Ordenamiento Urbano y Desarrollo Territorial le daba la posibilidad de abrir la consulta de 30 a 60 días hábiles: el Ayuntamiento determinó dar 31 días hábiles, es decir, reducir 29 días hábiles a la máxima posibilidad de participación.
“Se establecerá un plazo de treinta a sesenta días hábiles según disponga la convocatoria considerando la magnitud del programa, y un calendario de audiencias públicas para que los interesados presenten por escrito a las autoridades competentes, los planteamientos fundamentados que consideren respecto al proyecto sometido a consulta”, dice la fracción V de ese artículo.
En ambas consultas se estableció un calendario de seis audiencias públicas para cada una, con un horario de dos horas, en dos sedes: la unidad administrativa y las oficinas del Instituto Municipal de Planeación. Es decir, el tiempo efectivo para presentar planteamientos se redujo a 12 horas distribuidas en cada jueves dentro del periodo señalado en las convocatorias.
Este jueves 16 de enero se dio la tercera audiencia para el PMOTDU y la segunda para el PDUCP, con muy escasa participación. Susana de Jesús Bravo, presidenta de junta de mejoras de la colonia Virreyes, salió sorprendida: a 24 días de abiertas las consultas, le tocó el folio número tres como participante.
“Yo me enteré casualmente en mi colonia porque solamente una persona que lo vio en el periódico, pero la gente no se entera”, comentó.
Cuestión de prioridades para la autoridad municipal. Difícilmente la población se puede enterar de que se le convoca a dar su opinión cuando en spots de radio y televisión, anuncios en medios impresos, y las cuentas de Facebook y Twitter son utilizadas para promover la imagen del alcalde, invitar a pagar predial y el agua y, ni de chiste, invitar a participar en la consulta.
En Facebook y Twitter, diariamente aparecen hasta la náusea, imágenes de arranques e inauguraciones de obras, entregas de apoyos de piso a techo y en son de paz, llamados a pagar el predial y el agua… y ni una sola invitación o mera mención de la consulta para que los pobladores puedan dar su opinión sobre la ciudad que quieren para el futuro.
Tanta promoción de imagen y llamados a pagar contribuciones y servicios definen claramente a una autoridad interesada únicamente en que la ciudadanía la admire, le rinda pleitesía y le entregue su dinero, pero sin ningún interés en la participación real de la población; esa, la participación, es sólo para cubrir mínimamente lo que la ley obliga.