Ciudad de México (30 de noviembre de 2015).- En esta vida, hay para todos los gustos. Y esas clases y entrenamientos que te dejan deshecho al final del día no son la única alternativa para bajar de peso. De hecho, puedes optar por una actividad mucho más amigable con tu organismo: caminar.
Así es como puede ayudarte a adelgazar…
Previene los antojos.
Caminar, al igual que cualquier otro ejercicio físico, te mantiene activa y regula tus niveles de azúcar en la sangre. Estos efectos convierten a esta actividad en una manera natural de luchar contra esos antojos que ponen en riesgo tu diera, sobre todo, aquellos relacionados con la ingesta de azúcares y carbohidratos.
Te ayuda a dormir mejor.
El descanso es fundamental para mantenerse en forma. Si no descansas bien, es probable que tu cuerpo necesite más energía de la que realmente requiere y eso te hará comer más.
Caminar ayuda a regular el sueño, y por lo tanto, a perder peso.
Te pone de buen humor.
Está claro que cuando estás bien contigo mismo, tienes más ganas de cuidarte y de mejorar tus hábitos alimenticios. Por el contrario, cuando estás mal, puede que el refugio ideal sea la comida. ¡Caminar también te ayuda en ese sentido!
Reduce el hambre por estrés.
Los ritmos de vida que llevamos están claramente asociados al estrés. De hecho, es habitual que este tenga que ser tratado por especialistas.
Ahora bien: caminar te ayuda a reducir el estrés de forma natural. De este modo, podrás evitar el hambre emocional, ¡Y esto no es nada menor!
Como ves, caminar es un buen ejercicio que puedes practicar en muchas situaciones cotidianas, y que está asociado a enormes beneficios que complementan la pérdida de peso. ¿Qué dices, te animas a dar más paseos?
Fuente: Frente Fantasma.