Ciudad de México (24 de diciembre de 2015).- Una madre compartió en Facebook la reacción de su hija de 10 años al escuchar la verdad sobre Papá Noel. Sobra decir que no estaba nada contenta.
¿Recuerdas cuándo supiste la verdad sobre Papá Noel? Espera, sí sabes que él no es real, ¿Verdad? Lo siento. Quiero decir que yo tenía alrededor de 8 o 9 años cuando la física del viaje épico de Papá Noel comenzó a ser incongruente, y definitivamente recuerdo la conversación que tuve con mi madre sobre ello. Ahora, como un adulto, puedo recordar su incomodidad, intentando descifrar si ya estaba todo perdido para mí o si sólo estaba haciendo preguntas, hasta que finalmente dijo algo como “sí, no, tu padre y yo compramos todos los regalos, de nada”. No todas esas conversaciones resultan bien, al parecer. Toma como ejemplo lo ocurrido en Maryland cuando una madre, Nicki Adams, decidió decirle a su hija de 10 años la verdad sobre el hombre gordo de rojo:
El texto completo dice:
“No tienes idea lo que acabas de hacer. Realmente intenté creer. Todos me habían dicho que eran mis padres. Ya no te puedo creer nada. ¿Es real el conejo de Pascua? ¿Qué hay del ratoncito? Acabas de arruninar la vida de una niña de 10 años, gracias. Nada me va a hacer sentir mejor, me mentiste sobre algo que amaba y me rompió el corazón”.
Ouch. Podría llegar a ser doloroso si no fuera tan intrascendente y estúpido. Podrías tomar esto como una luz verde para evitar el tema y solamente dejar que los niños lo descifren por su propia cuenta, pero como un psicólogo lo explica, no es tan sencillo. Aunque no lo creas, hay pros y contras sobre decirles la verdad a los niños.
Los argumentos que van en contra de decirles a tus hijos sobre Papá Noel son pocos –puede ser que temporalmente los dañes emocionalmente (como arriba), y hay un poco de preocupación que puede causar que tus hijos duden de tu juicio en otras áreas. Los argumentos a favor del mito es el hecho que a) los niños obtienen felicidad con la idea de un hombre viejo y gordo traiga regalos para ellos, y b) la mejoría en comportamiento que se produce gracias a la lista de niños “traviesos o bien portados” son reales. Pero, hay más: Algunos estudios han encontrado que los niños con mucha imaginación y vidas de fantasía (como creer en Papá Noel, o tener un amigo imaginario) son de hecho mejores en distinguir entre la fantasía y la realidad.
Finalmente, no hay una recomendación clara sobre decirles o no la verdad a tus hijos sobre Papá Noel. Y realmente, no importa –lo van a poder descifrar tarde o temprano. Todo lo que puedes hacer es esperar que lo puedan manejar mejor que algunos niños.
Fuente: Askmen.