Abelardo Medellín
Un contingente de maestros jubilados tomó las oficinas de la Sección 26 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) en San Luis Potosí como protesta para denunciar el “mega fraude” en el que resultaron los fideicomisos para su retiro, los adeudos derivados de ese fraude y la resistencia del sindicato a realizar una auditoría externa a estos fideicomisos.
A las 10 de la mañana de este miércoles 7 de septiembre, los integrantes del Colectivo Magisterial Jubilados Unidos arribaron a las oficinas de la Sección 26, donde se dispusieron a tomar el edificio y colgar frente a él mantas con mensajes como: “Los jubilados de la sección 26 del SNTE exigimos el pago de bonos y complementaria en tiempo y forma”, “SNTE SNTE le robas a tu gente” y “Vigilar es su misión para proteger al jubilado ¡qué vergüenza nos han fallado!”.
El profesor Norberto Soto Hernández explicó que desde hace más de siete meses los jubilados no han recibido diversos bonos ni la jubilación complementaria.
“Desde que nuestro secretario general (Juan Carlos Bárcenas Ramírez) de la Sección 26 tomó las riendas de la dirigencia, hemos tenido muchos obstáculos para que se nos pague dicha complementaria”, afirmó.
Según Soto Hernández, hay incluso jubilados que desde hace tres años no han recibido ningún pago de la jubilación complementaria.
“Esta protesta además es porque nos quieren poner un nuevo esquema, este fideicomiso tiene 26 años de creado (…) iba en aumento, pero ahora en 2018 sacan un nuevo modelo, cambian de FONCASOL a FOPRESYR”, comentó.
De acuerdo con el profesor, el cambio de fideicomiso que se vieron obligados a aceptar, trajo consigo la reducción de su jubilación complementaria, misma que, para algunos, pasó de ser de 12 mil pesos mensuales a solo 7 mil.
Por su parte, el profesor Humberto García Rocha, de la Huasteca, afirmó que el fideicomiso inicial tuvo un capital de mil millones de pesos y el monto se perdió por las omisiones de los exgobernadores Fernando Toranzo Fernández y Juan Manuel Carreras López.
“Se quedaron con todo el dinero que correspondía al FONCASOL y después dejaron una deuda de 525 millones de pesos (…) el capital que ya teníamos de más de mil millones en el 2010 nomás lo desaparecieron, en 2017 nos dijeron que nada más tenían 600 millones, ¿y los otros más de 400 millones dónde quedaron?”, comentó.
El maestro Inés Oyarvide Escalante, de Tamuín, denunció que el responsable de la descapitalización del fideicomiso actual es la Sección 26 y dijo:
“Queremos la auditoria externa, ahí va a salir a dónde se fue cada peso, no es posible que nos quieran hacer borrón y cuenta nueva, rechazamos tajantemente la propuesta de la Sección 26, no la vamos a aceptar”.
Tras la toma del edificio de la Sección 26, algunos de los profesores presentes exigieron la intervención del gobernador Ricardo Gallardo Cardona, e incluso comentaron que las autoridades sindicales señalan al Gobierno del Estado como el responsable de la descapitalización del fideicomiso.
“Señor gobernador, pedimos la oportunidad de entrevistarnos con usted para manifestarle de forma directa y a plena voz nuestra inquietud y nuestra propuesta (…) estamos solicitando de inmediato una auditoria externa, como resultado de esta auditoría vamos a solicitar que se castigue a todos los saqueadores y corruptos”, expresó uno de los manifestantes.
De acuerdo con un comunicado compartido por los propios profesores, el Gobierno del Estado tiene una deuda de más de 127 millones de pesos por concepto de aportaciones pactadas con el FOPRESYR, cuyo origen son los descuentos que realiza la Secretaría de Educación a los maestros activos y jubilados.
Según los manifestantes, ese dinero que se retiene de los profesores desde 2018 no se ha visto reflejado en el pago de bonos, e incluso existe la versión de que pudo haberse utilizado para financiar campañas policías de los candidatos del Partido Nueva Alianza.
