Leticia Vaca
La diputada Marite Hernández Correa levantó la mano para encabezar la dirigencia estatal del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que se podría dar en el próximo mes de noviembre.
“Me emociona mucho poder participar en este ámbito del partido, sin embargo, hay que esperar, lo que uno desea es que tampoco existan imposiciones; me parece que ya Morena tiene bastante una carga muy amargan en ese sentido. Esperemos que exista autonomía y que sean los propios militantes quienes decidan quien será su dirigente y no se imponga desde la Ciudad de México como se ha venido acostumbrando. Es una buena apuesta que sea de manera local quienes decidamos quien sea nuestro dirigente o dirigenta”, dijo en entrevista.
Aunque aclaró que aún no hay una convocatoria, indicó que al menos hay tres perfiles masculinos que han levantado la mano para participar en la renovación de la dirigencia estatal: el senador Eli César Eduardo Cervantes Rojas; Moisés Cedillo, secretario general de Morena; y Guillermo Morales, ex consejero nacional de Morena.
Sin embargo, pese a que la convocatoria debe ser abierta, puntualizó que “es la oportunidad de las mujeres, hay toda una simpatía también. Me parece que las mujeres ocupen un cargo de esta trascendencia a nivel estatal, es fundamental para que exista una renovación, un cambio y se escuchen todas las voces”.
Hernández Correa estimó que lo más urgente para la nueva dirigencia de Morena debería ser armar un equipo que sea plural y abierto, donde se escuchen todas las voces de los militantes y simpatizantes, así como continuar con la agenda de izquierda.
“Trabajar en la formación de los propios militantes; la formación en talleres, cursos, que se utilice el recurso realmente para la formación de sus militantes y utilizar los recurso de manera transparente y honrada”, finalizó.