Por: Eduardo Delgado.
El arzobispo Jesús Carlos Cabrero Romero sostuvo que el exorcismo celebrado el pasado 20 de mayo en la Catedral “no tiene porqué asustar a nadie” y consideró que la inquietud social en torno a ese rito es producto de la “influencia de películas que han abusado mucho de término”.
Por eso, justificó, “lo hicimos a puerta cerrada… Porque si no ¿Cuánto morbo hubiera despertado?… y fue una oración que no duro más de media hora”, estimó.
Confirmó que invitó al exorcismo al Cardenal Emérito de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez e indicó que se trata de un acto religioso que “cada Obispo puede hacer, según crea o no en el hecho de que lo necesiten”, explicó.
En entrevista con el diario digital astrolabio.com.mx, el líder de la comunidad de católicos en la diócesis potosina explicó también las razones del rito celebrado hace casi un mes en la Catedral.
“El exorcismo tiene dos funciones: sobre cosas y sobre personas. El que hicimos tenía la finalidad de pedirle a Dios por el bien de la iglesia potosina, pero también por el de México y pedirle que todos los males se retiren”.
Antes, de inicio, opinó que de ese evento “nadie tiene por qué asustarse ni tampoco confundirse; fue una oración que la iglesia, constantemente, está realizando en favor de las personas, porque el fin es ayudarnos para que el señor, con su intercesión y fuerza, nos dé esa gracia y nos ayude a defendernos no sólo de la maldad sino a evitar ser instrumentos de maldad”, expuso.
“Porque cuando el hombre se presta a la maldad, muchas veces hasta sin concebirlo, llega a tales extremos que priva de la vida a otro y lo que nunca se imaginó, lo realiza”, añadió.
Dijo que este tipo de exorcismos se realizan en situaciones “que dejan ver mucha violencia, mucho olvido de Dios… Y deja ver mucha maldad, mucha saña. Y eso es lo que nosotros pretendemos eliminar, quitar. Esa parte que nos daña como personas, nuestra vida y convivencia”, explicó.
La intención expuso, es que la paz, el bien y el amor se impongan sobre la maldad, para lograr el establecimiento de relaciones fraternas, “que nos ayuden a edificarnos, porque (en San Luis Potosí y México) estamos viviendo tiempos muy difíciles”.
Advirtió que a la escasez de trabajo y crecimiento de la pobreza no se vencen “con paliativos sino con educación, con formación integral de la persona, con valores y ello implica educación, para que el hombre tenga oportunidades y acceso a una vida digna, a la que todos tienen derecho, pues no solo unos cuantos tiene derecho al bienestar social”.
Cabrero Romero, potosino de nacimiento, planteó que la palabra exorcismo proviene de un verbo latino que significa exhortar y animar.
“Exhortar y animar para que el maligno se retire, deje el corazón en paz de las personas y ellas puedan cumplir con su misión, porque hemos nacido para el bien, para difundirlo a través del amor, la justicia y la paz”, añadió.
- ¿De quién fue iniciativa esta ceremonia y si son comunes?
- El exorcismo tiene dos funciones: sobre cosas, edificios y sobre personas. El que hicimos tenía la finalidad de pedirle a Dios, en especial, por el bien de la iglesia potosina, pero también por el de México y que esos males se retiren.
Precisó que fue oración, no misa, a la cual invitó Sandoval Iñiguez. “Cada obispo lo puede hacer… yo sí creo que (para) nosotros, como iglesia potosina, es necesario pedir por el bien y la paz de todos los potosinos”, sustentó.
Comentó que durante la ceremonia hay un momento cuando “se bendicen los cuatro puntos cardinales, que son las cuatro puertas que tiene la catedral, justo para que el bien llegue a todos”.
- ¿Entonces nadie se debe de asustar?
- No veo porque el susto, no estamos haciendo cosas raras ni mucho menos a espaldas de la gente. Lo hicimos sopesada mente y de por medio una catequesis, instruyendo bien lo que significa y por eso en la iglesia potosina únicamente dos sacerdotes, de los que consideramos los más sabios, los más maduros e íntegros, son los que tienen este ministerio aplicado hacía las personas, para que no en todo tratemos de ver al diablo. Que es un espíritu superior a nosotros, porque nosotros somos espíritu rodeado de carne”.
- ¿En el caso de México se pidió por la inseguridad, violencia y también la corrupción?
- Todo lo que es maldad y que nos esta como desmoronando.
- ¿La política?
- La política, quiero aclarar, no es mala.
- ¿Los políticos?
- No, tampoco. Cuando no son los valores de servicio, de bienestar común, el progreso social…sino esta la política bien llevada entonces corrompemos una acción destinada para el bien.
