Por: Antonio González Vázquez
A quince días de que la LX Legislatura del Congreso del Estado finalizó su encargo entre críticas por su mal e improductivo desempeño, para la sesión ordinaria de la LXI legislatura a celebrarse este jueves, se presentará la primera iniciativa de ley que tiene como objetivo corregir errores de los anteriores diputados.
Xitlalic Sánchez Servín, diputada del Partido Acción Nacional, presentará Iniciativa con Proyecto de Decreto que propone reformar la fracción IX del artículo 3° de la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia del Estado de San Luis Potosí, con la finalidad de rectificar la redacción aprobada por la anterior Legislatura que distorsiona el sentido de la disposición referente a la violencia obstétrica.
En la exposición de motivos, en la que precisa la falla de los ex diputados, señala lo que sigue.
“Cito a continuación el dispositivo que es materia del error legislativo: La fracción IX del artículo 3° de la mencionada Ley, define a la Violencia Obstétrica como “todo abuso, conducta, acción u omisión intencional, negligente y dolorosa que lleve a cabo el personal de salud, de manera directa o indirecta, que dañen, denigren, discriminen y den un trato deshumanizado a las mujeres durante el embarazo, parto o puerperio; que tenga como consecuencia la pérdida de autonomía y capacidad de decidir libremente sobre su cuerpo y sexualidad”.
El yerro estriba en que se impuso el calificativo de dolorosa en lugar de dolosa, lo que desvirtúa completamente el sentido de la fracción y hace susceptible de equívocos la interpretación de la misma ante un tema de alcance tan delicado. Es claro, que el error contenido cambia en su totalidad el sentido de la norma, y con ese motivo propongo se realice la corrección sustituyendo la palabra “dolorosa” por “dolosa” que es la que debe caracterizar la violencia obstétrica.
Actualmente, en nuestro país, y San Luis Potosí no es la excepción, la violencia obstétrica afecta múltiples derechos humanos de las mujeres como los de igualdad, de autonomía, de no discriminación y de salud e integridad, por lo que resulta de vital importancia que el concepto guardé su espíritu, estableciendo las garantías que tienen las mujeres a recibir un trato digno y adecuado durante la etapa del embarazo y parto por parte de los médicos, velando siempre por el bienestar tanto de la madre como del bebé.
La diputada del PAN enfatiza en que el error de redacción cometido debe ser corregido de inmediato pues como lo dejaron los anteriores diputados, provoca que no se atiendan atinadamente los casos de violencia obstétrica.