Una joven ballena cazaba lobos marinos con su familia en manada cuando la pequeña hembra cometió un error que casi le cuesta la vida.
Al bajar la marea, la orca quedó atrapada entre las rocas en la costa norte de Columbia Británica, Canadá y comenzó a llorar desconsoladamente al no poder moverse.
Un velero que pasaba cerca, se percató del incidente y dio aviso a rescatistas y voluntarios, entre los que se encontraban Herman Meuter, cofundador de The Cetacean Lab e investigador de ballenas.
Los voluntarios la mantuvieron viva durante 8 horas, arrojándole agua y cubriéndola con prendas de ropa para protegerla de los rayos del sol, ya que si se hubiera secado hubiera muerto, informó la televisora CBC.
“La orca lloraba mucho”, dijo Herman Meuter quien también comentó que estaba estresada por estar atrapada y su respiración iba cada vez más rápido.
Al parecer la orca se dio cuenta de que era ayudada y se tranquilizó después de 20 minutos.
Cuando la marea subió, fue capaz de liberarse y se alejó nadando entre los aplausos de sus rescatistas, voluntarios e investigadores.
Al parecer su familia no estaba lejos, ya que según los investigadores, se escuchó como la pequeña se comunicaba con ellos.
