Por Victoriano Martínez
El segundo informe sobre los avances del Plan Emergente de Agua presentado este miércoles por el alcalde Enrique Galindo Ceballos deja dos noticias, una buena y una mala.
La buena es que se logró la recuperación de caudal de agua por 176 litros por segundo, que ayudan a suplir los 460 litros por segundo que debería entregar El Realito.
Para dimensionar qué tan buena es esa noticia se debe tomar en cuenta que, por las fallas en el acueducto, los 460 litros por segundo que debían llegar eran inyectados a la red de manera intermitente al grado de que en los primeros 75 días de este año llegaron sólo en 40, lo que significaría que se contó con sólo el 53.34 por ciento del agua de El Realito.
Los 176 litros por segundo que se recuperaron para inyectar a la red representan el 38.26 por ciento del total de la que debe llegar de El Realito. Es decir, sólo faltaría una recuperación del 15.08 por ciento más que se inyecte al caudal para estar en condiciones similares a las que se tenían antes del “día cero”.
Correría, pues, por la red una cantidad de agua similar a la que llegaba de El Realito, pero con una ventaja: es constante, sin las interrupciones totales por las fugas del acueducto, lo que tendría que aprovecharse para programar un sistema de tandeo que garantice un abasto, si no al 100 por ciento por lo menos con cierta regularidad, a las colonias afectadas.
La mala es que hay indicios de que aflojaron el paso… o cuando menos en los últimos 22 días no se avanzó mucho.
“Gracias a la rehabilitación de pozos, rebombeos y plantas tratadoras, el Plan Emergente de Agua del Gobierno de la Capital y el Nuevo Interapas logró la recuperación de 176 litros por segundo de los 460 litros por segundo que enviaba la presa El Realito a la Capital de San Luis Potosí”, informó el Ayuntamiento en el comunicado CSA_2580, del 11 de julio pasado.
“Gracias a las acciones del Plan Emergente de Agua del Nuevo Interapas y el Gobierno de la Capital, se ha logrado la recuperación de caudal de agua por 176 litros por segundo, que ayudan a suplir los 460 litros por segundo que debería entregar El Realito”, refriteó el Ayuntamiento en el comunicado CSA_2702, de ayer 2 de agosto, con motivo del segundo informe de avances.
Si se comparan los comunicados, entre l 11 de julio y el 2 de agosto el único cambio en lo informado es que los pozos Posible I y II pasaron de un avance del 80 al 90 por ciento, y se incorporó la información sobre un avance del 37.7 por ciento en la perforación del pozo Posible III, sin mencionar el caudal que éste aportará a la red.
Sobre los dos primeros pozos, el 11 de julio se mencionó que aportarán a la red un caudal de 130 litros por segundo, lo que representa que la recuperación pasaría a un 65.21 por ciento, con lo que se lograrían condiciones mucho mejores a las previas al “día cero”. Si se avanzó un 10 por ciento en 22 días, para el 24 de agosto posiblemente el alcalde presuma ese logro.
La recuperación de 176 litros por segundo, de acuerdo con el comunicado sobre el segundo informe, “se ha logrado gracias a la rehabilitación de 32 pozos, además de dos plantas potabilizadoras y seis plantas de rebombeo”. Es decir, gracias a acciones que deberían ser rutinarias para mantener un eficiente servicio de abastecimiento de agua.
Algo así como que el origen de la crisis hídrica está en parte en las fallas de El Realito, pero también en el descuido de quienes han encabezado el Interapas, por haberse atenido a que El Realito resolvería el abastecimiento.
El comunicado sobre el segundo informe señala que “ya se concluyeron los estudios geológicos de los tres pozos restantes: en la Carretera 57, que dará 40 litros por segundo (lps); en San Leonel, con un caudal de 40 lps y Los Filtros, que recuperará 35 lps”.
Es decir, con esos tres pozos la recuperación del caudal a la red llegaría a 415 litros por segundo por lo que sólo faltarían 45 para recuperar el total perdido por las fallas de El Realito, que bien podrían ser los que aporte el pozo Posible III, sobre el que ninguno de los dos comunicados señala cuánta agua aportará.
De revertirse la “mala noticia” de haber aflojado el paso, hoy sólo parece cuestión de tiempo para que se dé una potencial buena noticia: para el abastecimiento de agua potable a la ciudad ya no será indispensable el agua de El Realito, de tal manera que cuando vuelva a operar, ya no habrá razón alguna para que falte agua en una sola vivienda, a menos que se vuelvan a atener.
¿Por qué se tuvo que llegar a la emergencia y el dramatismo para realizar las acciones que se tendrían que haber realizado de forma cotidiana y sin desplantes alarmistas como anunciar que se acabó el agua?
