La policía es un cuerpo civil encargado de mantener el orden público y la seguridad de la ciudadanía; salvo algunas excepciones van armados, y tienen autorización legal para usar la fuerza.
Por razones de organización interna algunas policías han dividido sus funciones para atender los asuntos viales, y aunque a veces hasta usan uniformes diferentes se trata de un mismo cuerpo, generalmente a cargo del Presidente Municipal.
El baño de sangre en que se convirtió la “guerra contra las drogas” de Felipe Calderón cuando era Presidente de la República, desembocó en una tremenda violencia en todos los espacios públicos, llegando a niveles sólo vistos en países en guerra.
Como usted bien sabe se volvió una asignatura pendiente para todos los gobiernos municipales y estatales el tema de que las policías cumplieran con su misión constitucional, y con ese pretexto se volvieron también un barril sin fondo en cuanto al dinero que reciben las corporaciones y el cómo lo gastan; es un enigma lo que hacen con el dinero las policías, porque ocultan la información bajo el pretexto de que se trata de temas de seguridad y por ello deben estar clasificados. Como sea no rinden cuentas, y gastan inmensas cantidades de dinero.
A pesar de las carretadas de dinero público asignadas a la seguridad durante los últimos diez años, esta se ha ido deteriorando hasta ser prácticamente inexistente. Contaminadas por el dinero excesivo y asediadas por el crimen organizado las policías se volvieron inútiles, consiguiendo el desprecio ciudadano y la desconfianza en todo cuanto hacen o emprenden.
En la búsqueda de hacerlas confiables los políticos marrulleros que nos gobiernan optaron por dejar a las policías en manos de militares en activo o en retiro, porque la institución más respetada de México es precisamente el Ejército Nacional.
La estrategia volvió a fallar, y las policías se convirtieron en espacios para militares retirados, y en lugar de que la disciplina castrense las permeara, fueron las mañas y las corruptelas las que sedujeron a los soldados metidos a policías.
Nada parece funcionar para prestigiar y volver útiles a las policías, lo que la gente nota de primera mano y les ha agarrado una tirria permanente.
El Estado no es capaz de proteger a la ciudadanía, mantener el orden y garantizar que todas las actividades humanas se ajusten a las leyes; la sociedad piensa que el Estado no sirve, y que sus instituciones sólo están para preservar los privilegios de la clase política que nos gobierna, ergo hay que quitar del medio a esas policías inútiles y hacer las cosas uno mismo. Ya podrá advertir que esa conclusión aunque lógica no es la mejor, y convierte a la sociedad en una selva.
Muchos ciudadanos, hartos de ser víctimas de los delincuentes, e incluso de las mismas autoridades, han decidido hacerse justicia por mano propia, como las autodefensas de Michoacán, cuyo aplastamiento por el gobierno fue injusto, violento y excesivo, mire si no, aún está preso el doctor Mireles, un médico decente e íntegro que tomó las armas para defender a la gente de la violencia criminal de cárteles y policías en ese estado de la República, en tanto que los delincuentes siguen libres e impunes.
En San Luis Potosí ha habido también brotes de esa inconformidad social, y si bien la ciudadanía no ha llegado al punto de conformar autodefensas, sí se ha organizado en sus vecindarios, colonias, pueblos y rancherías para procurarse seguridad y tranquilidad.
En la zona metropolitana de San Luis Potosí, según cifras del Gobierno del Estado, la violencia criminal se ha incrementado hasta casi 500 % sólo en el último año, los gobiernos municipales de Soledad y de la capital lo han negado, pero si fuera mentira el desmesurado aumento de la violencia criminal en nuestra zona metropolitana, entonces no se explicaría el que vecinos de varias colonias en Soledad de Graciano Sánchez hayan puesto lonas con advertencias a los delincuentes, de que los vecinos estaban en pie de lucha y que si los agarraban la pagarían.
Miles de personas diariamente son asaltadas con violencia, centenares de negocios, casas habitación y oficinas son robadas, cientos de vehículos, desde motocicletas y hasta tractocamiones son botín diario para los delincuentes.
Pero la gota que derrama el vaso son los cientos de personas asesinadas en nuestro San Luis, y ahora súmele los atentados criminales en contra de antros y restaurantes; los habían balaceado e incendiado en horas en que ya estaban cerrados, ahora lo han hecho repletos de personas que asistían a divertirse, logrando con ello que la ciudadanía esté inerme y en peligro de muerte.
La policía parece desmantelada, convertida en inútil a propósito.
Deje le doy unos pequeños botones de muestra ¿Se ha preguntado por qué en la avenida Salvador Nava uno ya no ve una sola patrulla de policía evitando las altas velocidades, o impidiendo que circulen motocicletas y camiones de carga por los carriles centrales? ¿Por qué ya no hay patrullas regulando el flujo vehicular en el distribuidor Juárez, sino grúas o camionetas civiles con lonas para identificarlas como de tránsito? Si Usted pensó que era por abulia puede que se equivoque, dicen de adentro que es porque no tienen vehículos ni oficiales.
El 911 no funciona, como no funcionaban los números anteriores, oiga, ¿y los presidentes municipales de San Luis y Soledad no se habrán dado cuenta que no tienen policía, ni patrullas, ni motocicletas? ¿O cuáles son las razones para que la policía no funcione en nuestra ciudad?
Mire que al no haber policía los delincuentes se ensañan con la gente y se enfrentan en interminables guerras internas por el control del crimen y del territorio. Ejecuciones, balaceras, persecuciones entre pistoleros, disputas por la primacía en el cobro de piso y la extorsión, cadáveres de personas evidentemente ejecutadas, levantones, paseíllos de sujetos armados hasta los dientes a plena luz del día.
Al inutilizar a la policía ¿En la ciudad capital y su conurbación soledense se les dio patente de corso a los malos? ¿A qué malos? ¿Con quién hablan? ¿De quién son socios o patrones?
Temario
Ponga Usted atención a los siguientes temas:
- En el PAN inician las hostilidades frontales de su dirigencia en contra el Círculo Azul.
- Festivales de cantera y enchilada que llamarán la atención de todos, para que no se acuerde Usted de los postes de la Procesión del Silencio, de las obras inacabadas del centro, de los crímenes impunes en contra de usuarios y socios de Uber, y los cometidos por éstos.
Leonel Serrato Sánchez
unpuebloquieto@gmail.com
