María Ruiz
El municipio de Cerritos, ubicado en la zona centro del estado parece sumirse en la violencia y la omisión.
El pasado 17 de septiembre, se ventiló en varios medios de comunicación del municipio vecino de Rioverde que un elemento de la Guardia Civil Estatal (GCE), mejor conocido como “El Camello”, había sido víctima de la privación ilegal de su libertad en la comunidad de Palo Alto, a una hora 43 minutos de distancia de Cerritos, cercano al entronque con la carretera federal México 57.
Según lo atestiguado por varios residentes de esta pequeña localidad, varios hombres supuestamente armados habrían bloqueado el camino por el que se dirigía el vehículo del elemento policial, para proceder a capturarlo y subirlo a otro automóvil en contra de su voluntad.
Un día después, su automóvil fue localizado sobre la carretera 70 al municipio de Rioverde con presuntas huellas de violencia y manchas hemáticas en la parte interior. Horas después el elemento de la Guardia Civil apareció con vida.
El silencio del Estado
Este acontecimiento expone otro ángulo de la historia. Pues también se vio afectado Francisco Armando González Cruz, policía estatal retirado ya hace 10 años, quien acompañaba al elemento de seguridad al momento de ser “levantado”.
La noche del 17 de septiembre, la familia González dejó de recibir información del señor Francisco, por lo que al día siguiente interpusieron una denuncia ante la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas (CEBP) para que se emitiera una ficha por la desaparición de este padre de familia, según informó Lya Michelle González Gallegos, hija del afectado.
Luego de haberse enterado de que “El Camello” fue privado ilegalmente de su libertad y encontrado un día después con vida, la preocupación y la angustia incrementó para la familia González Cruz.
“Tuvimos que acudir a la Delegación Cuarta de la Fiscalía General Del Estado, en el municipio de Rioverde para solicitar información de los hechos. Ellos dijeron desconocer qué había pasado, entonces nosotros levantamos otra denuncia ahí en la Fiscalía”.
Hasta el momento, la familia González Cruz ya rindió su declaración ante la Fiscalía, para así poder comenzar las investigaciones sobre el paradero de Francisco.
“Cada minuto que pasa sin saber nada de mi papá es una pesadilla, les pido de corazón que no nos olviden en sus oraciones, mi papá no andaba en nada malo, solo estuvo en el momento equivocado. Aquí te esperamos papá tienes que regresar. Te amo viejo”.
Insisten, además, en que el municipio de Cerritos se ha convertido en un punto álgido de violencia y delincuencia, pero que la omisión y silencio del Estado como de las autoridades les preocupa, pues al no haber transparencia en la información mantienen sus dudas respecto a lo que posiblemente le pasó al señor Francisco.