Antonio González Vázquez
La LXII legislatura del Congreso del Estado cerró el pasado sábado su primer ordinario de sesiones correspondiente al primer año de ejercicio y su principal propuesta a la sociedad quedó incumplida. Habían ofrecido disminuir su salario y no lo hicieron; la propuesta de reducción de la dieta fue sometida a un “estudio” de factibilidad hasta ahora desconocido.
Al arranque de la legislatura en septiembre, se presentó al pleno una iniciativa de proyecto de plan de austeridad que contenía una reducción de hasta el 50 por ciento del salario que perciben los diputados.
Por mayoría, esa propuesta fue desechada. No obstante, el tema fue tomado por la Junta de Coordinación Política que anunció se iniciaría un estudio a fondo por parte de la Oficialía Mayor para definir la viabilidad de disminuir el salario de los legisladores.
En ese sentido, Edson de Jesús Quintanar Puente, diputado por MORENA y presidente de la Junta, nunca dio a conocer los resultados de ese estudio de manera que los integrantes de la LXII legislatura mantienen el salario de la anterior, calificada como “la peor legislatura de la historia en San Luis Potosí”.
El sábado concluyó el primer período ordinario de sesiones y no se tomó ningún acuerdo en materia salarial de los legisladores. El siguiente periodo se inicia en febrero, pero no hay interés en subir de nuevo el asunto a la discusión. De este modo, un diputado local mantiene sus percepciones mensuales por 115 mil 858 pesos.
En contraste, al cierre del primer período ordinario de sesiones, el legislativo deja una carga de iniciativas pendientes muy elevada. 156 iniciativas que duermen el sueño de los justos en comisiones.
La legislatura anterior en sus tres años de labor dejó 656 iniciativas sin dictaminar. Si los diputados en turno mantienen su improductividad superarán en improductividad a la llamada peor legislatura de la historia.