Washington, Estados Unidos (24 de octubre de 2016).- Una larga lista de políticos republicanos ha decidido retirar su respaldo al candidato presidencial del partido conservador, Donald Trump, a raíz de la serie de injurias que el magnate neoyorquino ha expresado durante su campaña.
Las declaraciones de Trump sobre migración, derechos humanos, economía,minorías y otros temas coyunturales incluso han provocado que prominentes figuras del Partido Republicano anunciaran públicamente que votarán por la demócrata Hillary Clinton.
La familia Bush, encabezada por el ex presidente George H. W. Bush, ha decidido sufragar por Clinton.
El patriarca de los Bush, su esposa Barbara y sus hijos George -predecesor de Barack Obama- y Jeb Bush, quien compitió con Trump en las primarias republicanas, optarán por la candidata presidencial demócrata en las elecciones del 8 de noviembre.
Los mismo hará el senador republicano por Nueva York, Richard Hanna, quien fue el primer conservador con una banca en el Congreso en anunciar que votará por Clinton.
“No es apto para servir a nuestro partido y no puede liderar este país”, dijo Hanna en una artículo para el periódico The Post-Standard, de Siracusa, Nueva York.
“En todo se muestra impenitente”, consideró.
La directora ejecutiva de Hewlett Packard Enterprise, Meg Whitman, una destacada recaudadora de fondos para el Partido Republicano y ex candidata al gobierno de California, también dijo que apoyará a la rival de Trump.
“Como una orgullosa republicana depositar mi voto para presidente ha sido un asunto sencillo. Este año es diferente”, dijo Whitman en su perfil oficial de Facebook.
“La mano temblorosa de Trump podría poner en peligro nuestra prosperidad y la seguridad nacional. Su carácter autoritario podría poner en peligro mucho más”, escribió Whitman
El ex candidato presidencial Mitt Romney, quien perdió las elecciones de 2012 ante Barack Obama, es otro de los políticos republicanos que esta vez votará por la aspirante demócrata.
En el mismo tenor están Arnold Schwarzeneger, ex gobernador de California; Hank Paulson, ex secretario del Tesoro; William Milliken, ex gobernador de Michigan; Lindsay Graham, senador por Carolina del Sur; Ben Sasse, senador por Nebraska; Carlos Curbelo, representante por Florida; y el estratega Patrick Ruffini.
Al igual que Brent Scowcroft, ex asesor del presidente George H. W. Bush; Richard Armitage, ex secretario de Estado adjunto; y varios ex legisladores.
“Cada vez estoy más confiado de que Trump es un sociópata, sin conciencia o sentimientos de culpa, vergüenza o remordimiento. Además, es patológicamente inseguro, al atacar irresponsablemente a todo el que no lo confirme como ‘el mejor’”, opinó el ex senador republicano Gordon Humphrey, al argumentar su voto por Hillary Clinton.
Cambian de bando.
La aversión de algunos republicanos por Trump es tal que hasta han organizado grupos activos de apoyo a Clinton.
“No sería capaz de mirar a la cara a mis nietos si votara por Trump”, declaró Dan Webb, ex fiscal federal.
Webb, que se autodefine como ‘republicano por décadas’, ahora trabaja para convencer a empresarios republicanos en Chicago de respaldar a Clinton.
El cabildero republicano Craig Snyder es otro conservador que ha decidido hacer campaña activa para Clinton bajo el grupo ‘Republicans for Her 2016’.
También destacan las formaciones ‘R4C16’, liderada por John Stubbs y Ricardo Reyes, ex funcionarios del gobierno de George W. Bush; ‘Republican Women for Hillary’, codirigido por Jennifer Pierotti Lim, funcionaria de la Cámara de Comercio de Estados Unidos.
Hartos de Trump.
En el Partido Republicano hay otro sector que, pese a rechazar a Trump, no ha decidido votar por Clinton, sino que simplemente le ha retirado su apoyo al empresario.
En este grupo figuran Paul Ryan, actual presidente de la Cámara de Representantes; John McCain, senador por Arizona y ex candidato presidencial republicano; John Kasich, gobernador de Ohio y ex rival de Trump en las primarias; Gary R. Herbert, gobernador de Utah.
Del mismo modo piensan Jason Chaffetz, representante por Utah, y Kelly Ayotte, senadora por New Hampshire.
“La conciencia ya no me deja apoyar a esta persona para presidente”, declaró recientemente Chaffetz, quien curiosamente ha tenido un papel protagónico en la investigación a Hillary Clinton por los ataques ocurridos en Bengasi, Libia, en 2012, y la polémica de sus correos electrónicos durante su gestión como secretaria de Estado.
Los más “moderados” pero molestos.
En un tono más mesurado, otro sector de los republicanos demandó la renuncia de Donald Trump a su candidatura en favor de su candidato a vicepresidente, Mike Pence.
Este grupo está encabezado por John Thune, senador por Dakota del Norte, quien fue el primer republicano del Senado en pedir la dimisión de Trump.
A Thune se han sumado Bill Haslam, gobernador de Tennessee; George Pataki, ex gobernador de Nueva York; Jon Huntsman, ex gobernador de Utah; Marta Roby, representante por Alabama; y Mike Coffman, representante por Colorado.
Más de 160 republicanos le han negado el respaldo a Trump a lo largo de la carrera electoral, más los que se sigan acumulando de aquí al definitivo martes 8 de noviembre.
Fuente: Univisión / El País / AP / EFE.