Fernanda Durán
Este miércoles 19 de octubre entra en vigor la reforma a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia que considera como delito grave arrojar ácido o alguna sustancia corrosiva a una mujer.
La iniciativa que fue presentada por Esther Mandujano, diputada del Partido Acción Nacional (PAN), reforma la Fracción II del Artículo 6 de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, dentro de la definición de violencia física.
“La violencia física. – Es cualquier acto que inflige daño no accidental, usando la fuerza física o algún tipo de arma, objeto, ácido o sustancia corrosiva, cáustica, irritante, tóxica o inflamable o cualquier otra sustancia que, en determinadas condiciones, pueda provocar o no lesiones ya sean internas, externas, o ambas”, indica el decreto.
Con la nueva reforma pretenden que se impongan penas más severas, así como salvaguardar el bien jurídico tutelado que es la vida, salud, honor y el derecho al pleno desarrollo de la personalidad.
De acuerdo con Fabiola Alanís, titular de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim), en los últimos tres años, la Secretaría de Salud y la institución que representa han identificado al menos 126 ataques cometidos con ácido contra mujeres.
Esther Mandujano expresó en su cuenta de Twitter que con el propósito de “coadyuvar en la prevención y erradicación de la violencia hacia las mujeres, propuse iniciativa de ley para adicionar y sancionar la violencia en el noviazgo”.
Ya que en diversas partes del país se registraron casos de este tipo, no obstante, de acuerdo con las legislaciones estatal y federal, no era considerado un acto de gravedad.
Por su parte, la diputada Julieta Kristal Vences Valencia, de Morena, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, señaló que estos ataques se realizan de manera premeditada para buscar venganza por celos, rechazos sexuales o románticos, o incluso por no cumplir con roles socialmente asignados.