Eduardo Delgado
La regidora panista Verónica Rodríguez Hernández atribuyó su destitución como presidenta de la Comisión de Gobernación en el Cabildo a “pasiones electorales” y consideró ser víctima de persecución y acoso laboral de parte del alcalde interino, Alfredo Lujambio Cataño.
En entrevista con Astrolabio Diario Digital, dijo no estar sorprendida por su relevo, porque “desde antes, cuando (Alfredo Lujambio) aspiraba a ser alcalde interino, dejó ver que poco le importa pasar por encima de las mujeres para cumplir sus aspiraciones”, refirió.
“Me queda claro que, como no estoy apoyando al alcalde con licencia (en el proceso interno de elección del candidato del Partido Acción Nacional a la gubernatura), esto es una persecución con pasiones electorales”, aseveró respecto al comentario publicado este jueves en el periódico El Universal, en su columna Kiosco, relativo a que fue removida “por no aprobar los planes de desarrollo territorial”, en cuyo asunto “los más interesados son los desarrolladores inmobiliarios cercanos al precandidato a la gubernatura, Xavier Nava”.
Respecto a lo referido en el diario de la Ciudad de México acerca de que su cambio fue también porque de manera pública ha externado su apoyo a Octavio Pedroza Gaitán, aseguró que su “apoyo externo, como militante, a uno de los aspirantes seguirá firme, pero también mi trabajo como regidora, que es velar por los intereses de las y los potosinos”.
A su parecer, la designación de la regidora priista Verónica Campillo Salazar, la ejecutó el presidente interino “aprovechándose de una laguna en el reglamento interno” y “de la forma más ruin, porque yo esperaba que, mínimo, me dirigiera un documento personalmente”, “pero fue a través de terceros como me enteré de la remoción, sin alguna solicitud de información sobre el trabajo de la Comisión o dar mayores detalles que derivaran en esa destitución”, añadió.
De si combatirá legalmente su relevo, Verónica Rodríguez dijo que, junto con sus compañeros regidores y el síndico de Acción Nacional, analiza cuáles son las mejores opciones, porque admitió que el edil está facultado para nombrar al presidente y al secretario, pero quizá no respecto de la rotación de las presidencias.
Asimismo, añadió que durante la administración navista “el talón de Aquiles son las mujeres que alzamos la voz, que cuestionamos y señalamos cuestiones como las que acabamos de ver y no nos quedamos calladas ante los atropellos”.
Independientemente de las acciones legales por las que decida, anticipó, “no me quedaré callada. Seguiré alzando la voz y señalando lo que esta administración haga mal”.
Dijo sentirse “atropellada”, porque no le remitieron copias del escrito por el que la regidora priista fue notificada de su nombramiento y sólo le mandaron la convocatoria a la toma de protesta de su sucesora; tampoco fue informada de cuáles fueron las causas o la razón de su cambio, ni el alcalde le pidió una explicación o informe sobre el funcionamiento de la comisión.
En su escrito, Alfredo Lujambio le expuso a Verónica Campillo que el cambio tiene que ver con los programas de ordenamiento territorial, con lo cual “es muy claro para mí que hay un interés de por medio”, dijo la panista.
“He pedido que se hagan las modificaciones que las y los regidores acordamos con el Implan en las últimas mesas de trabajo y por ello no descarto que las presiones externas hayan ya alcanzado al alcalde interino, y hoy me tocó a mí pagar los platos rotos respecto a ese tema”, juzgó.
Se asumió víctima de persecución política, acoso laboral e incluso de “pasiones políticas electorales; qué lástima que el regidor en funciones del presidente se deje llevar por pasiones electoreras y si además responde a lo que le dice el jefe, es una lástima”, remarcó.
Advirtió que hay muchas situaciones por revisar en esta administración, “incluso que tienen que ver con dinero”, cuyos casos “vamos a seguir señalando y a poner el dedo en renglón para que se revisen a profundidad y respondan quienes tengan que responder”.
Rodríguez Hernández reiteró que “esto no calla mi voz, ni siquiera en los planes de ordenamiento territorial. Seguiré pugnando porque se revisen adecuadamente, porque se escuchen todas las voces y que no quieran madrugarnos, porque seguramente eso es lo que van a intentar”, opinó.
“Al destituirme de la presidencia de la comisión lo que quieren es aprobar los programas al contentillo del alcalde interino y seguramente de quien le ordena, que está hoy fuera”, concluyó.