Por: Eduardo Delgado.
A menos de tres meses de asumir la Dirección Ejecutiva de Asuntos Jurídicos en el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (CEEPAC), Ricardo Sánchez García presentó este jueves su renuncia a ese cargo, en desacuerdo con “la comodidad burocrática” que impera entre el personal del organismo presidido por Laura Elena Fonseca Leal.
Apenas el 30 de noviembre de 2015, en sesión plenaria, las consejeras y los consejeros aprobaron el acuerdo por el que designaron o ratificaron a una docena de titulares de las áreas ejecutivas de dirección, así como de órganos técnicos.
“Mi trayectoria profesional no me permitiría continuar indefinidamente en una estructura burocrática, si al revisar mis propios indicadores de satisfacción estos no se ven cumplidos a nivel personal y profesional”. Además de que “la posibilidad de incidir en una rígida estructura es mínima”, asentó Sánchez García en escrito que envió a consejeras y consejeros para comunicarles su determinación.
Les explicó que al asumir cargo se planteaba “que debían existir cuatro jefaturas” en el área que le fue encomendada: de Asuntos Legales; Quejas y Denuncias; Normatividad y Consulta, y la de Instrucción “Recursal” (sic).
Recordó que una quedó acéfala porque Lizbeth Lara Tovar fue nombrada como responsable de la Unidad de Prerrogativas y Partidos Políticos, y aparte se realizaron otros cambios.
“Durante mi periodo se nombró al Jefe de Normatividad y Consulta; se designó a nuevo responsable de Asuntos Legales, pero se retiró el apoyo de los tres asistentes jurídicos y se despidió a la asistente de la dirección”, añadió.
El pasado primero de febrero, precisó, la jefatura de Quejas y Denuncias quedó vacante y que enseguida demandó cubrir la estructura con personal suficiente. “Desde el inicio de mi gestión al ver la necesidad insté la colaboración de una asistente o secretaria”, lo que “no fue posible bajo el argumento de insuficiencia de recursos”.
Asimismo, agregó el dimitente, consciente de la resistencia del personal de base “por haber sido elegido” para ocupar el cargo, “procuré siempre mantener una continua comunicación con el Secretario Ejecutivo respecto de la forma de trabajar”.
No obstante, “existió la manifestación expresa de una Jefatura por no acatar ningún tipo de indicaciones y mucho menos realizar encomiendas que no fueran a su criterio, propias de su nombramiento”.
Advirtió que “la anquilosada relación existente en el personal permea en las decisiones fundamentales de reorganizar este instituto y pueden llegar a perjudicar enormemente la eficiente realización de los objetivos”.
Por tanto, subrayó, decidió separarse del cargo que le fue conferido y que según el acta de la sesión celebrada el 30 de noviembre, fue aprobado con cinco votos a favor y dos en contra.
En su escrito Sánchez García les recomendó a los miembros de ese organismo colegiado, “actualizar la situación laboral de todos los trabajadores y trabajadoras, incluyendo a los de la Dirección de Asuntos Jurídicos” y “asignar una asistente o secretaria al director”.
Les sugirió también revisar el desempeño de las jefaturas, “evidenciar las conductas acartonadas por la comodidad burocrática en estatus quo que sobreviven y valorar a quienes han venido presentando su servicio en forma eficiente y eficaz, pero con contratos temporales, para garantizar la estabilidad laboral.
Finalmente consideró indispensable esclarecer las funciones de cada unidad, dirección y coordinación, para realizar con eficiencia las actividades previas posteriores a las sesiones del CEEPAC.