Texto y fotografías de María Ruiz
Por segundo día consecutivo, las calles de San Luis Potosí se vieron llenas de manifestantes, pero esta vez el rugido de los motores acompañó el grito de justicia. Repartidores en motocicleta se unieron a la marcha por Dariana, la joven estudiante, skater y conductora de plataforma, asesinada el domingo 22 de septiembre, para alzar la voz no solo por su caso, sino por los peligros que día a día enfrentan las mujeres que, como ella, salen a trabajar en las calles.
El contingente de motociclistas que se integró a la marcha a la altura del distribuidor Benito Juárez destacó la vulnerabilidad de las mujeres conductoras y repartidoras en un contexto cada vez más violento.
Con pancartas en las que se leían “Ni una más” y “Justicia para Dariana”, los motociclistas recorrieron el Centro Histórico para llegar a la Fiscalía General del Estado (FGE), donde una vez más se exigió transparencia y justicia.
José Luis, quien trabaja como repartidor de comida, explicó que esta marcha no sólo es en memoria de Dariana, sino también para visibilizar los peligros a los que se enfrentan cada día en la calle.
“Sabemos que a las mujeres les toca lo peor. Nosotros vivimos robos, asaltos, pero lo de ellas es peor. Las agreden por ser mujeres”, comentó.
La comunidad de motociclistas y repartidores no dejó pasar la oportunidad de recalcar que la inseguridad no discrimina, pero sí afecta con mayor crueldad a las mujeres.
“Nosotros salimos cada día a trabajar, igual que Dariana lo hacía, y es triste ver que no estamos protegidos. Si esto le pasó a ella, nos puede pasar a cualquiera, pero duele más porque ella era una compañera y su crimen fue más allá de un robo, fue un ataque contra su derecho de vivir”, mencionó una joven repartidora.
El feminicidio de Dariana ha encendido el debate sobre la violencia contra las mujeres conductoras de plataformas y repartidoras, quienes como ella, se enfrentan a una doble amenaza: la de la inseguridad y la de un sistema que no les ofrece protección. A pesar de las detenciones de los presuntos responsables, la comunidad no siente que sea suficiente.
Por su parte, la fiscal general María Manuela García Cázares informó que la principal línea de investigación apunta a un robo. Sin embargo, también se sigue el protocolo para investigar el caso como feminicidio.
A la par, la hermana de Dariana, quien ha sido la portavoz de la familia, denunció una vez más la falta de claridad y las constantes largas que les han dado las autoridades.
“Nosotros como familia, y ahora también nuestros compañeros de plataformas, estamos hartos. No nos dicen nada, no sabemos cómo va la investigación, ni siquiera nos han entregado el cuerpo de mi hermana”, reclamó durante la marcha.
Además, señaló que los propios conductores de plataforma ya tenían identificados a los presuntos responsables, pero las autoridades no actuaron a tiempo.
“Lo que le pasó a mi hermana se pudo haber evitado”, sentenció.
La manifestación se desarrolló de manera pacífica con los repartidores en moto formando una fila en silencio frente a la Fiscalía, mientras sus compañeros a pie colocaban veladoras y flores en memoria de Dariana.
Aunque la exigencia de justicia sigue siendo el motor de estas marchas, el mensaje de hoy fue claro: “No queremos más compañeras muertas”.
