Restaurarán estatua de 200 años dañada por caída en la Catedral de SLP

María Ruiz

El pasado 3 de junio la tranquilidad habitual de la Catedral Metropolitana de San Luis Potosí se vio interrumpida por un lamentable incidente. Una persona con problemas de salud mental ingresó al recinto y empujó una estatua policromada de San Pablo, que data de hace 200 años, lo que provocó daños a la pieza.

Tomás Cruz Perales, vocero de la Arquidiócesis potosina, informó que el individuo logró acceder al altar mayor, también conocido como ciprés, y en un acto rápido derribó la estatua. El personal de mantenimiento y aseo de la Catedral que realizaba sus labores habituales se percató de la presencia inusual del sujeto, quien violó las restricciones de acceso y ejecutó el daño.

El antropólogo Hugo Cotonieto Santeliz, encargado del Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de San Luis Potosí, detalló los eventos de ese día y los daños sufridos por la escultura.

“La caída de la estatua fue muy fuerte, causando considerables daños. Ambos brazos de la escultura, hechos de madera, se rompieron: uno se fracturó completamente del hombro y el otro se rompió en tres fragmentos”, explicó.

El INAH, con su protocolo habitual, envió a personal especializado para asegurar una recuperación adecuada de los fragmentos. Según Cotonieto Santeliz, “se resguardaron todos los fragmentos, incluso los más pequeños, para integrarlos de nuevo durante la restauración”.

El proceso de restauración, que aún está en sus etapas iniciales, implicará limpieza, fijado, consolidación y reintegración de las piezas.

“Es crucial que estos trabajos los realice un restaurador profesional con licencia del Instituto. Se aplicarán técnicas específicas, como el uso de rayos X, para asegurar la autenticidad y preservación de la pieza”, explicó el antropólogo.

La restauración se llevará a cabo con un seguro institucional del INAH, el cual protege las obras de arte sacro de los templos virreinales. Esto permitirá cubrir los costos de restauración debido a que el incidente involucró a una persona con problemas de salud mental, lo que complica la obtención de compensaciones de otra manera.

El padre José Inés Galván, apoderado legal de la Catedral Metropolitana, comunicó el incidente al INAH y colaborará en el proceso de restauración, por lo que se estima que la licencia para iniciar los trabajos de restauración podría ser emitida en un mes, tras los ajustes y aprobaciones necesarios del proyecto.

Este incidente, señaló Hugo Cotonieto, destaca la importancia de proteger y conservar el patrimonio cultural y religioso de México, así como la necesidad de contar con protocolos y seguros que permitan la recuperación y restauración de piezas valiosas como la estatua de San Pablo en la Catedral de San Luis Potosí.

Skip to content