Portada: Búsqueda de Andrés Fructuoso Salazar en Huizachal en Rioverde, el 30 de octubre de 2018. Fotografía: Marcela Del Muro
Marcela del Muro
Rioverde
Nueve días antes de que su hijo Carlos desapareciera, Olga Lidia recibió una llamada avisando que se lo habían llevado. Pero fue hasta el 20 de diciembre de 2021 que la amenaza se cumplió.
Carlos Issac Huerta Pérez, de 27 años, y su novia María Elizabeth Gaytán, de 21, salieron a andar en bicicleta por la ciudad de Rioverde, en la zona Media del estado, y nunca regresaron, desde entonces no se sabe nada de ellos.
La desesperación y desolación es muy profunda. La familia de Carlos ya pasó por otra desaparición cinco años antes: el esposo de su tía Maty, Andrés Fructuoso Salazar, de 36 años, fue levantado y desaparecido el 14 de diciembre de 2016. Un comando armado se lo llevó de su taller mecánico ubicado en el bulevar Carlos Jonguitud Barrios, avenida por la que entras de la capital del estado a la ciudad.
El año pasado este municipio se convirtió en un hoyo negro de desapariciones de personas. La delegación de la Fiscalía en la entidad se encuentra rebasada, comentan las mismas familias que buscan a sus desaparecidos.
Cuando reportaron la desaparición de Luis Miguel Martínez García, de 24 años, ni siquiera dieron el número de denuncia a su familia.
Lo que se cree es que a Luis se lo llevaron unos conocidos. Eran alrededor de las ocho de la noche del 30 de noviembre de 2021, el joven iba saliendo de su trabajo, testigos lo vieron caminando por el Centro de Salud de la colonia Puente del Carmen, rumbo a su casa. “Solo hay silencio”, comenta su familia materna, ellos perciben mucho miedo en el entorno cercano de Luis, pero exigen una respuesta de las autoridades.
En lo que va de 2022 se han reportado cuatro personas desaparecidas y en el 2021 se registraron 36 desapariciones en la entidad, según la página de pesquisa de la Fiscalía General del Estado y las fichas de búsqueda emitidas por la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas. Lamentablemente estas dos fuentes de datos no coinciden y el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO) lleva tiempo sin ser actualizado por las autoridades estatales.
En el colectivo de familias de víctimas de desaparición, Voz y Dignidad por los Nuestros, “hasta septiembre del año pasado, teníamos ocho familias en Rioverde, pero después de esa fecha un montonal”, comenta Edith Pérez Rodríguez representante del colectivo.
Según datos de la Fiscalía, desde enero del año pasado comenzaron a registrarse desapariciones, una o dos por mes. Hasta que llegó junio con cuatro hombres desaparecidos, tres se cometieron el 3 de junio de 2021. En julio, cinco hombres y una mujer fueron reportados, cinco de ellos desaparecieron en días consecutivos: el 5, 6, 7, 9 y 10 de julio.
“Está tremendo, en Rioverde a cada rato se están encontrando cuerpos”, dice Edith, algunos de ellos se han encontrado en fosas clandestinas, enterrados o semienterrados.
La señora Yazny Lucero Garza Bautista, de 41 años, desapareció el 4 de octubre de 2021 en plena zona Centro del municipio. Ella era muy conocida en Rioverde porque sacó adelante a sus hijos manejando un taxi. A Garza Bautista la desaparecieron junto a su pareja y dos amigos de él: Eduin Andrés Molina Pérez de 38 años, Miguel Ángel Suarez Torres de 37 y Juan Carlos Pérez Vega de 42; los tres hombres son de nacionalidad colombiana.
El 1 de febrero, las autoridades rioverdenses realizaron una búsqueda en un gran terreno cercano a la supercarretera, a unos metros de la planta embotelladora Coca Cola. Ahí, en una fosa, encontraron cuatro cuerpos. El 12 de febrero los hijos de Lucero Garza informaron que su mamá había sido encontrada muerta en ese lugar. Hasta ahora la oficina científica no ha dado los resultados de los otros tres cuerpos.
“Son muchos sentimientos encontrados, por un lado agradezco que pudiéramos encontrar el cuerpo. Desgraciadamente hay muchas familias que recorren este mismo camino, el cual tienen algún familiar desaparecido desde hace más de 10 años. Y por otro lado me duele la manera en la cual me arrebataron a mi madre, mi amiga, mi confidente, mi vida entera”, comentó la hija de Lucero.
“La delincuencia ha rebasado a las autoridades. Y a nosotros como habitantes de Rioverde no nos queda más que cuidarnos y cuidar de los nuestros”, dice Tere, quien busca a su hija Perla Guadalupe Padrón Castillo, desaparecida el 14 de junio de 2013 junto a su pareja José Alberto Gallegos Torres. Ella platica que hace unos meses una “tremenda balacera” la despertó en medio de la madrugada, “finalmente nos enteramos que se trataba de un operativo contra una casa de seguridad que duró tres horas”.
En medio de tanta violencia se comprende el miedo que narra la familia de Luis. Esto provoca que no haya denuncia de muchas personas que están ausentes, por lo tanto es imposible saber la cifra exacta de desapariciones en la zona.
Tamasopo
A 76 kilómetros de Rioverde, ya en la huasteca potosina, se encuentra el municipio de Tamasopo, conocido por sus cascadas, pozas y montañas cubiertas de vegetación. Un lugar muy frecuentado por turistas nacionales e internacionales.
En lo que va de 2022 se han reportado siete desapariciones. En el 2021 se registraron 10 personas desaparecidas. Pero en Tamasopo se calcula que la cifra negra es aún mayor porque la violencia ha paralizado a la población.
A los hermanos Francisco Javier, de 19 años, y Luis Ignacio Aguilar Rivera, de 20, se los llevaron del Barrio de La Mora el 25 de octubre de 2021. Para su mamá, esa ha sido la noticia más dolorosa que ha recibido en su vida. “Uno siempre busca que sus hijos estén bien”, comenta.
Hace unos días se cumplieron cuatro meses de que su mamá no sabe nada de ellos. Aún con miedo, ella pide a los amigos de sus hijos que den información para localizarlos. “Yo no busco culpables, solo quiero recuperar a mis hijos”, dice la señora.
En Tamasopo, el colectivo Voz y Dignidad por los Nuestros buscaba a tres personas, desde el año pasado empezaron a llegar cada vez más casos. “Pero ahorita ya son como 25 carpetas solo de Tamasopo, hay más de los pueblitos, como Tambaca”, dice Edith Pérez.
Pobladores de Tamasopo, que prefieren guardar su anonimato por seguridad, comentan que frecuentemente se ven camionetas extrañas circulando por el pueblo.
“Es algo que comentamos, pero solo entre familia y amigos de confianza. Este lugar era tan tranquilo, pero ahora no hay ley”.
El pasado 9 de febrero el Cabildo de Tamasopo aprobó la licencia, hasta el 13 de abril, para Luis Alberto Abundis Rangel, presidente municipal. El alcalde se encuentra en investigación tras disparar un arma de fuego durante una cabalgata por la fiesta patronal de la localidad El Trigo, a mediados de enero.
La respuesta de las autoridades
El viernes 25 de febrero, los integrantes de Voz y Dignidad por los Nuestros se reunieron con el fiscal José Luis Ruiz Contreras y el secretario de Gobierno José Guadalupe Torres Sánchez, para expresar su preocupación por el repunte de desapariciones en el estado.
Edith Pérez entregó un pliego petitorio con varias urgencias por atender para prevenir que sigan existiendo más desapariciones. Con un alza tan alarmante de casos es necesario que se agilice la búsqueda de personas y se contribuya en la pronta localización.
Ruiz Contreras señaló que “se robustecerán las acciones para mejorar la coordinación entre el personal de la Unidad de Personas Desaparecidas de la Fiscalía Especializada en Materia de Derechos Humanos, y en torno a diligencias de prospección que ya se tienen programados a lo largo de este año”.