Maria Ruiz
Ante la renuncia de Cecilia González Gordoa al Partido Revolucionario Institucional (PRI), el alcalde capitalino, Enrique Galindo Ceballos, dijo que son parte de los embates que ha sufrido este instituto durante toda su historia y que de ninguna manera lo debilita.
No obstante, señaló que será necesario analizar las causas del por qué últimamente figuras de tal presencia abandonan el partido.
“Ya me reuniré con el presidente del PRI para externarle mis observaciones de lo que creo se tiene que hacer dentro del partido. Sin embargo, de entrada es algo que en lo personal no me inquieta que suceda”, agregó.
Negó, además, que el PRI enfrente una debacle política, y que un ejemplo de ello es el cargo de alcalde que el ostenta.
“Hoy soy alcalde priista de la capital, en la cual desde hace muchos años no habíamos ganado. El PRI, junto con su coalición, gobierna casi alrededor de 30 municipios y yo gobierno a un poco más de un millón de habitantes, y así es como se mide la potencia y la influencia del PRI”, sentenció.
Por último, el edil quiso dejar claro que “mucha gente desea enterrar al PRI” con estos acontecimientos, pero que, por el contrario, esta entidad política se fortalece.