Por: Antonio González Vázquez
Hasta el último momento, los partidos políticos y candidatos han ido de encontronazo en encontronazo. El choque de trenes entre equipos de campaña de los candidatos fue el sello del proceso electoral que hoy culmina con la instalación de las urnas que estarán a la espera de los electores. El clima político y social no es el más propicio desafortunadamente, pero son ahora los ciudadanos los que tienen la última palabra.
Al igual que hace seis años, en la víspera de las elecciones se difunden rumores convertidos en noticia sobre presuntos operativos de compra de votos. Entre el PRI y el PAN se acusaron desde el inicio de las campañas y hasta unas horas antes del inicio de la jornada electoral.
La circunstancia político electoral no es la mejor, hay que recordar que en el proceso ha habido dos ejecuciones, un operador electoral del PAN y una dirigente municipal del PRI. Hoy en el día de las elecciones, es preciso recordar que las campañas fueron violentas en muchos casos, no solo se limitaron a las acusaciones sino que llegaron a los hechos.
Los escándalos creados en torno a la trayectoria de Juan Manuel Carreras López, sobre sus propiedades y negocios como secretario de Educación desde donde hizo florecer la universidad de la que es propietario. Los recursos públicos recibidos para “capacitar” a custodios del CEPRERESO y otras variantes de mal ejemplo de un servidor público.
En su contraparte, a Sonia Mendoza le enarcaron en su pasado y en su vida familia para atacarla y exhibirla, le señalaron con reiteración el padrinazgo del ex gobernador Marcelo de los Santos, le criticaron por pretender parecer elegante y bonita con el apoyo del potohoshop. Le acusaron también de repartir despensas y de gastar millones de pesos en campaña.
Esos, solo por citar un par de ejemplos, porque en términos generales de eso se trataron las campañas: propuestas ausentes y ataques permanentes.
Se realizaron dos debates que pasaron sin pena ni gloria, un debate más de los candidatos a la presidencia municipal capitalina con resultados similares en cuanto a la carencia de ideas y proyectos de cómo resolver los problemas.
En el proceso electoral crecieron los ánimos a latitudes insospechadas que presagian conflictos en municipios como Soledad de Graciano Sánchez, Cerro de San Pedro, Villa de Reyes, Santa María del Río, Villa de Ramos, Matehuala, Ríoverde, El Naranjo, Ciudad Fernández y prácticamente toda la Huasteca sur.
Hay siete candidatos a gobernador y de ellos, Sonia Mendoza y Juan Manuel Carreras llegan en empate técnico según sondeos nacionales. La diferencia no es de más de tres puntos efectivos. Con esa diferencia hace seis años ganó el PRI.
Este domingo podrán votar un millón 859 mil 632 personas. 999 mil 698 son mujeres lo que representa el 51.83 de los electores. 895 mil 731 son hombres y representan el 48.17 por ciento.
En los 58 municipios de la entidad, se instalarán 3 mil 552 casillas y 83 mil 187 ciudadanos votarán por primera vez.
De los 58 municipios de la entidad, el PRI gobierna 35. La alianza PRI-PVEM tiene en el Congreso del Estado 15 de las 27 posiciones. La primera minoría es del PAN con solo seis diputados.
En las primeras horas de este lunes ocho de julio, se sabrá si el PRI mantiene su hegemonía o si hay un cambio.
