Se burlan comisionados de CEGAIP de obligación de difundir sus declaraciones patrimoniales

Por Victoriano Martínez

Los integrantes de la Comisión Estatal de Garantía de Acceso a la Información Pública (CEGAIP) no desaprovechan ninguna oportunidad para demostrar su nula convicción a favor del principio de máxima publicidad por cuya defensa reciben anualmente, libres de impuestos, casi un millón de pesos: rechazaron que sus declaraciones patrimoniales se hagan públicas.

En los formatos que emite la Auditoría Superior del Estado (ASE) para la presentación de las declaraciones patrimoniales, los comisionados Yolanda Camacho, Claudia Ávalos y Oscar Mendoza respondieron a la pregunta “¿Otorga su consentimiento para hacer público su patrimonio reservando los datos estrictamente confidenciales?” con una marca en el recuadro NO.

Los tres defensores oficiales del derecho de acceso a la información pública coincidieron además en presentar su declaración patrimonial hasta el último día permitido, el 31 de mayo, a pesar de que podían hacerlo a partir del primer día de ese mes.

A pesar de que la ley de transparencia que entró en vigor a partir del 10 de mayo pasado obliga a que esos documentos se hagan públicos 15 días después de presentados, en el portal de transparencia de la CEGAIP los documentos no han sido publicados. No obstante, se vieron obligados a proporcionarlos el pasado 22 de junio como respuesta a una solicitud de información.

Los documentos les fueron requeridos desde el 24 de mayo, lo que representa que los comisionados utilizaron la prórroga de 10 días para dar la respuesta, en una señal más de su vocación por prolongar el cumplimiento de la ley al máximo, en perjuicio del principio de máxima publicidad con el que deben regirse.

Pero los atentados al principio de máxima publicidad no terminan ahí: los documentos proporcionados al solicitante, cuya petición quedó registrada en Infomex con el folio 00196716, resultan ser los formatos que emite la ASE con los espacios que contienen la información completamente testados.

Los garantes del acceso a la información sólo dejan ver su nombre, su cargo, la fecha en que presentaron la declaración patrimonial, el monto de sus ingresos como servidores públicos, el periodo de la declaración, su firma… y, por supuesto, su negativa a que su patrimonio se haga público.

Los defensores de la transparencia ocultan los ingresos de su cónyuge y dependientes, otros ingresos propios, adquisiciones de bienes inmuebles, gastos de manutención, posesión y compra de vehículos, inversiones, entre otros, que son los elementos esenciales de cualquier declaración patrimonial, para los efectos por los que fue creada.

“La declaración patrimonial permite conocer el estado, evolución y valor estimado de los bienes que posee el declarante desde el inicio hasta el fin de su encargo. Hacerla pública permite que los ciudadanos puedan monitorear que el patrimonio del funcionario o persona de interés público crezca conforme a sus ingresos y los de sus familiares”, es la descripción que el portal www.tresdetres.mx hace de lo que debe conocerse.

Los comisionados de la CEGAIP incurrieron, además del ocultamiento de la información, en una omisión para facilitar al solicitante la consulta del solicitante sobre los documentos al proporcionar un escaneo página por página, por separado, y en formato de imagen, lo que obliga al peticionario a una consulta por separado y no en un solo archivo.

Las declaraciones patrimoniales proporcionadas corresponden a quienes hasta ese momento eran los tres comisionados de la CEGAIP. El pasado 30 de junio el Congreso del Estado nombró a Alejandro Lafuente como comisionado de ese organismo, y a un mes de haber asumido el cargo, el portal web de la Comisión sigue sin actualizar el directorio en el que ya se incluya su información.

Si han pasado 31 días sin que haya sido capaz de ordenar que se actualice la información para que los usuarios de su página de internet tengan información real sobre la integración de la Comisión, poco podrá esperarse un cambio en los criterios que pudiera favorecer el principio de máxima publicidad de la información en asuntos como la declaración patrimonial.

Astrolabio Diario Digital procesó los documentos para incorporar cada uno en un archivo PDF para que puedan ser consultados por sus lectores, y puedan constatar que entre entregar una información testa da como la que se entregó y no entregar nada, es mejor que la hubieran negado, pues lo proporcionado constituye una verdadera burla.

 

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