Abelardo Medellín
El empresario Potosino acusado de fraude, asociación delictuosa y conformación irregular de empresas, Gabriel Salazar Soto, dio una conferencia de prensa la mañana de este miércoles 29 de julio, donde negó todos y cada uno de los señalamiento en su contra en un ejercicio que él calificó como “transparencia”, pero donde se encargó principalmente de descalificar a quienes lo han acusado.
A Salazar Soto se le ha señalado durante los últimos cuatro meses de incumplir con los pagos que la empresa Infinite debe a sus inversores, de tener contratos irregulares con la Secretaría de Salud del Gobierno del Estado y de conformar empresas que han concursado en licitaciones que no tienen ni domicilio fiscal ni apoderados legales enterados de su implicación.
A todas las acusaciones en su contra Salazar Soto intentó responder el día de hoy, sin embargo la rueda de prensa se centró en el tema de los adeudos que tiene con los inversionistas de la empresa Invercorp.
“Han acusado a nuestras empresas de no existir, han falseado información, han utilizado información privada, que no es de acceso público”, expuso Gabriel Salazar, quien agregó que las acusaciones de haber huido eran falsas y que sus asociados no tenían de que preocuparse porque “yo aquí estoy, aquí sigo, no pienso irme”.
Asimismo, aseguró que la falta de pago de intereses a los inversionistas en su empresa se debe a que el grupo que dirige pasa por problemas financieros, lo que ha provocado que no tengan la liquidez para pagarle a quien invirtió hace un año.
A pesar de aclarar esta parte, el empresario potosino no explicó cómo es que su empresa planeaba pagar intereses con tasa de 120 por ciento anual o por qué algunos de los que invirtieron desde hace dos años dejaron de recibir los pagos prometidos dos meses después de haber entrado al negocio.
Salazar Soto aseveró que, tras los problemas económicos y de liquidez de su empresa, se tomó la decisión de “solucionar el problema a través de las formas que dispone la ley […] lo haremos a través de un concurso mercantil”.
Según el dicho del empresario, el grupo Infinite había tenido un éxito notable desde hace ocho años y comenzó a pasar por problema de liquidez recién hace seis meses.
La decisión del concurso mercantil aún no se ha iniciado ni siquiera en su etapa de conciliación, sin embargo, sostuvo Salazar Soto, el motivo principal de iniciar este proceso es mantener a flote sus empresas, que no se pierdan los espacios de trabajo generados y pagar al cien por ciento la deuda con los inversionistas de Invercorp.
De la misma manera, negó que se “tratara de evadir responsabilidades” y adujo que no había nada similar a “un proceso de quiebra”, ya que sus empresas y oficinas seguían abiertas; mientras tanto, en la puerta frente al edifico donde se celebró la rueda de prensa, un grupo de sus inversionistas intentaba entrar para dialogar con él sobre los adeudos y los elementos de seguridad uniformados de traje les prohibían el paso.
Salazar Soto explicó que este concurso mercantil podría tardar hasta 180 días naturales, “con la posibilidad de que dure hasta 12 meses”, y uno de sus asesores financieros explicó que la primera etapa iniciará a mediados de agosto de este año.
En su intervención, el abogado en materia penal, catedrático de la Facultad de Derecho y representante de Salazar Soto, Héctor Vega Robles, hizo énfasis en que “de ninguna manera se ha constituido un delito de fraude, de ninguna manera, esto no es un delito”; además, agregó que su representado ha aceptado la falta de pagos a sus inversionistas, pero que este sólo se ha incumplido por “situaciones económicas y de salud”.
El abogado de Salazar Soto refirió que “la mayor parte de los querellantes son personas que han recibido de alguna manera utilidad, sin embargo en estos meses no se les ha podido dar esa participación, pero se va a cumplir”.
Vega Robles reiteró que “no había un incumplimiento como tal”, ya que “la inversión se realizó, están los activos y las empresas existen”.
LOS ACUERDOS
Según Salazar Soto ya se iniciaron pláticas con los inversionistas que no han recibido sus activos, con quienes se han logrado 46 convenios penales (es decir, un acuerdo formal), así como 84 personas en pre convenio.
De acuerdo con inversionistas que han presentado querellas legales en contra de la empresa Invercorp y Gabriel Salazar Soto, hay más de 800 personas defraudadas y que aún esperan el pago de sus activos; ante esta cifra de posibles defraudados Salazar Soto puntualizó: “no, yo mostré los documentos donde exponemos que la suma es de 638 personas a los que aún les debemos y de esas hay 267 personas que ya tienen algún tipo de convenio, pre convenio o liquidación”.
De acuerdo con los datos revelados por el empresario, de las 638 personas a quienes se les adeudaba, restaría un grupo de 372 que están a la espera de algún concurso mercantil u otro acuerdo; sin embargo, Alfonso Vázquez, uno de los afectados, advirtió que los acuerdos ofrecidos por Salazar Soto siempre perjudican al acreedor.
“Lo que hacen es que si tu invertiste 100 mil pesos, te dan tus activos dos meses, luego dejan de pagar, y ahora nos salen con que lleguemos a un acuerdo donde nos van a regresar un 70 por ciento de mi inversión, es decir, sólo me van a regresar una parte”, abundó.
Salazar Soto señaló durante la rueda de prensa que si los acuerdos con adeudados no han prosperado o culminado en su totalidad, se debe a que los abogados de algunos inversionistas que han demandado se niegan a hablar con los asesores de Invercorp, cosa que tampoco es cierta, según Alfonso Salazar, quien afirmó que “ya nos hemos reunido tres veces con él y no conseguimos ningún acuerdo justo, todos lo favorecen a él y a su empresa”.
¿Y LA SECRETARÍA DE SALUD Y SUS CONTRATOS?
El empresario Gabriel Salazar comentó ante los medios que su relación con la secretaria de Salud de Gobierno del Estado, Mónica Liliana Rangel Martínez, no es más que “una relación de prestador de servicio y cliente”, y apuntó que, efectivamente, tienen un “sin fin” de contratos con la dependencia, pero también rechazó que hubiera algunos contratos de los que se le ha acusado: “niego rotundamente los contratos de seguridad que han acusado de mal habidos con las poco profesionales investigaciones que se han realizado”.
Salazar Soto no volvió a tocar el tema y dijo no saber por qué los medios y organizaciones civiles supondrían que tiene nexos o acuerdos con personajes de la política estatal.
“Podríamos durar días en la comprobación”, arguyó Gabriel Salazar, quien después negó que hubiera inconsistencias en firmas de los contratos constitutivos de algunas de sus empresas, tal como lo exhibió a través de su investigación la organización Ciudadanos Observando.
“Las firmas son completamente reales, si se parecen o no una y otra, la verdad no podría decirlo, no soy un perito”, refutó.
MÁS JUSTIFICACIONES Y FIRMAS
Sobre el caso de Verónica Martínez Alfaro, trabajadora de una de las empresas del grupo Infinite que también aparece en actas constitutivas de 11 empresas de Salazar Soto, el empresario aseguró que las firmas de esta trabajadora estaban en contratos bajo la figura de comisaria y que no había más que aclarar; sin embargo, Verónica Martínez, en entrevistas pasadas, desconoció el por qué su nombre y firma aparecían en estas actas sin su consentimiento.
Sobre el desconocimiento que tiene Verónica Martínez sobre el uso de su firma, Salazar Soto arguyó: “este contrato no es mentira, es contrato como comisario […] no se me ocurre por qué lo negaría, no puedo pensar con ella, yo dirijo empresas, no tengo problemas personales con nadie”.
¿QUIÉN ATACA A GABRIEL SALAZAR SEGÚN GABRIEL SALAZAR?
A pesar de no señalar a personajes políticos, empresas competidoras, la volatilidad del mercado o inversionistas enojados, como enemigos, Salazar Soto sí respondió a la pregunta de quién ha orquestado este supuesto golpeteo: la prensa.
El empresario recordó que la primera nota que acusaba a sus empresas de alguna irregularidad fue publicada el 29 de abril en una columna del periódico Pulso, donde “nos acusaban de tener muy sucios los hospitales de San Luis Potosí ahora en 2020, también de brindar un servicio deficiente de seguridad privada con la empresa Escolta, de haber prestado servicios en 2018 y pidiendo que se nos rescindiera el contrato”.
De acuerdo con Salazar Soto ya se presentó una denuncia contra el periodista que “dañó su imagen” y espera que las autoridades procedan como es debido.
Dijo, además, que algunos de los medios que asistieron a la rueda de prensa lo habían “acusado de huir” y que eso fue “irresponsable y poco profesional”, pues esas notas fueron escritas por la prensa “solo para generar nota; a falta de una calidad suficiente, nos han acusado de huir a mí y a mis padres, ajeno a la realidad”.
“Me han desprestigiado a mí, como Gabriel Salazar, han entrado en una zona de discriminación incluso”, acusó el empresario, quien ejemplificó que “me han matado en un choque”, y agregó que las organizaciones y medios que han investigado las relaciones de sus empresas con la Secretaría de Salud, incluso han incurrido en “actos de acoso”.
Salazar Soto ocupó cerca de tres minutos de su rueda de prensa para asegurar que la prensa de investigación se ha dedicado a publicar “impresiones”.
RENDICIÓN DE CUENTAS
“Si en algún punto tengo que enfrentar un proceso penal de cualquier tipo, con gusto acudiré con mi propio pie y ni me resistiré a ninguna cuestión a la cual tenga que cumplir”, aseveró Salazar Soto antes de acabar su intervención.
Del mismo modo, reconoció que ha recibido requerimientos de la Fiscalía General del Estado (FGE), pero aclaró que estos son para mesas donde se busquen acuerdos con los inversionistas de Invercorp, a los cuales aún se les deben activos; según el empresario, él ha asistido a todas.
No obstante, Alfonso Vázquez, a la salida de la rueda de prensa, comentó que “él (Salazar Soto) no se ha presentado, lo puede revisar en la Fiscalía, si el quisiera verdaderamente arreglar habría armado una cita para firmar un convenio, ante la ley y la Fiscalía, pero no firma, nunca se ha presentado, de hecho nunca ha ido a la Fiscalía, eso se puede comprobar”.
