Ciudad de México (18 de julio de 2016).- El ciclo de llegada de nuevas armadoras automotrices a México ya paró debido a las condiciones de producción tan adversas, afirmó Guido Vildozo, especialista del sector automotriz de IHS Global Insight.
Tres compañías que consideraban el país para instalarse se decantaron por otras localidades: Jaguar-Land Rover se fue a Eslovaquia, Volvo se estableció en Carolina del Sur y Hyundai, que analizaba instalarse al lado de KIA en Pesquería, no concretó nunca por los problemas que tuvo con el gobierno de Nuevo León.
“Nunca digas nunca, pero el ciclo de negocios ya llegó a su final porque no hay el crecimiento regional deseado para justificar la inversión de una planta adicional.
“Ahí tenemos preocupaciones porque primero veremos el establecimiento de estas plantas nuevas, que tienen que entrar en función porque claramente hemos visto que las que han entrado recientemente en operación todas han tenido problemas, incluyendo la última que fue Pesquería”, destacó.
Durante las Conferencias de la Economía e Industria Automotriz de México organizadas por la consultora y el Instituto de Desarrollo Empresarial Anáhuac (IDEA), se explicó que en un tiempo muy corto de tiempo llegaron seis nuevas plantas al país.
Así, KIA, Audi, Ford, Toyota, Mercedes-Benz, Infiniti y BMW, se instalaron en el país y la última de ellas comenzará a operar en 2019 pero luego, no habrá más inauguraciones.
“Aquellas plantas que veíamos podían llegar para el Bajío ya encontraron un lugar feliz y no fue en México”, dijo Vildozo.
La producción automotriz en México está pasando por un mal momento, y esto tampoco está apoyando la llegada de nuevas inversiones.
Esto, porque Estados Unidos no está llegando al ritmo económico que se planificaba originalmente, además que hay temas culturales, de infraestructura y una mano de obra que no necesariamente está cubriendo los requisitos.
Fuente: El Financiero.