Desiree Madrid
Personal de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ubicada en el fraccionamiento Morales, ha alzado la voz para denunciar lo que consideran un ambiente laboral tóxico y hostil, derivado de presuntos abusos de poder y conductas inapropiadas ejercidas por la directora de la unidad, Alma Rosa Olvera Mendoza.
De acuerdo con el testimonio de los trabajadores, la directora ha incurrido en prácticas que van desde el hostigamiento y maltrato, hasta la discriminación y la misoginia.
También la acusan de utilizar medidas coercitivas y violar derechos laborales y sindicales, actitudes que han generado, según afirman, un entorno de trabajo que describen como “insano” y “opresivo”.
Paradójicamente, mientras la unidad se encuentra en proceso de certificación de calidad, el cual promueve valores como respeto, honestidad y trabajo en equipo, el personal afirma que dichos principios son constantemente contradichos por las propias acciones de la directora, las cuales afectan tanto al equipo como a los derechohabientes.
Uno de los principales reclamos es la falta de liderazgo positivo y la constante presión ejercida por Olvera Mendoza quien, aseguran, ha llegado incluso a realizar falsas acusaciones, amenazas y señalamientos injustificados hacia su personal. Esta situación ha sido denunciada ante diversas instancias sin recibir respuesta.
La preocupación entre los trabajadores se ha intensificado debido a la falta de acción por parte de los representantes sindicales y autoridades delegacionales quienes, según afirman, están al tanto de antecedentes similares en el historial de la funcionaria.
