Por Victoriano Martínez
Este 2018 ya se perfila para ser el año más violento en el Estado en los últimos 28 años.
El gobierno de Juan Manuel Carreras, en consecuencia, también pinta para ser el más violento de los últimos siete gobiernos, incluidos interinos e interino del interino.
Y no se trata de percepción. Son las cifras del Secretariado Técnico del Consejo Nacional de Seguridad Pública.
En los primeros seis meses de este año se han registrado 482 homicidios. Sólo faltan 18 para completar la cifra que se reportó durante todo el 2017, hoy el más violento.
Con los homicidios ocurridos en julio, y después de un fin de semana en el que se reportaron cinco, para el día de hoy la cifra del año pasado seguramente ha quedado rebasada.
Al mes de junio, el sexenio de Carreras López acumula mil 737 homicidios, con lo que antes de llegar a la mitad de su administración se encuentra cerca de alcanzar la cifra total de asesinatos ocurridos durante todo el sexenio de su antecesor.
Un panorama totalmente desalentador si se observa la tendencia que lleva ese grado de violencia máxima que atenta contra la vida de los potosinos.
Desde que inició el gobierno de Carreras López, el número de asesinatos no ha dejado de incrementarse.
Pero tampoco han dejado de incrementarse la totalidad de los delitos del fuero común.
Tan solo en los primeros seis meses de 2018 ya se han denunciado 17 mil 708 delitos. Una cifra espeluznante si se considera que poco más del 93 por ciento no se denuncian.
La percepción de inseguridad no es gratuita, como tampoco lo es la percepción del incumplimiento de sus obligaciones por parte de Juan Manuel Carreras López.
