Angélica Campillo
El vocero de la Arquidiócesis de San Luis Potosí, Juan Jesús Priego Rivera, dijo ver con simpatía que la mujer ya no acepte ser violentada por ser mujer, sin embargo reprobó que hayan vandalizado varios edificios públicos de la capital potosina.
En rueda de prensa, el sacerdote mencionó que la Iglesia aplaude el que la mujer ya no quiera ser tratada con violencia, pero en su marcha del pasado 25 de noviembre utilizaron la violencia, situación que demerita su movimiento y su pretensión.
Dijo lamentar las pintas que las feministas hicieron en edificios como el del Congreso del Estado, en la casa de la Acción Católica, en el edificio Central de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, así como en la Fiscalía General del Estado, ya que, consideró, son edificios de todos y el clero no comparte la idea de que “es un edificio, acá son vidas”, pues se puede crear un movimiento fuerte sin violencia.
“Si yo grafiteo se me van a ir a la yugular, ¿por qué entonces a un colectivo no? No nos gusta que utilicen la violencia para pedir que no haya violencia. Vandalismo, no es manifestación”, agregó.
Priego Rivera señaló que las autoridades tienen que ser más categóricas ante este movimiento, no ejercer la violencia, pero sí pedirles muy seriamente que no vandalicen los monumentos y edificios que son patrimonio de todos, porque “si su lema es ‘ni una más’, nosotros les decimos ‘así no’”.
Asimismo, comparó las muertes de mujeres y de hombres en México, y explicó que la relación es de 9 a 1, es decir que de 10 personas asesinadas, nueve son varones y una es mujer, pero si por este motivo los hombres salieran a manifestarse y destruyeran cosas, sería un espiral que no acabaría nunca.
