Sierra de Álvarez, prototipo para descuidar un Área Natural Protegida

Por Victoriano Martínez

El pasado 7 de abril se cumplieron 42 años de la publicación del decreto federal que declaró Área Natural Protegida a la Sierra de Álvarez y, al día de hoy, sigue sin contar con su plan de manejo que haga efectiva la protección ambiental, a pesar de contar con un gran foco de contaminación en el centro de su territorio: La Calera.

Tras 26 años de gobiernos priístas, 12 de gobiernos panistas y cuatro y medio de un gobierno morenista en el ámbito federal, y 34 años de gobiernos estatales priístas, seis años de uno panista y casi dos años de uno presuntamente ecologista, la protección ambiental a la Sierra de Álvarez se quedó en una declaratoria sin el respaldo de una sola acción real a su favor.

No hay gobernante que no se declare públicamente ecologista y protector del medio ambiente, pero en la inmensa mayoría se trata de proclamaciones que no se reflejan con hechos y, en el caso del gobierno estatal potosino, esa incongruencia es mayor por tratarse de una administración que llegó abanderada por el Partido Verde Ecologista de México.

La operación de La Calera al interior de la ANP Sierra de Álvarez es un problema mayor que, por el mismo rumbo, tiene una réplica que, aunque de menores proporciones, genera un daño serio a los pobladores de un amplio sector de la zona oriente de la ciudad: la planta de Calidra “El Zacatón” instalada en una zona de uso habitacional sobre la carretera Rioverde.

Se trata de dos situaciones que dejan expuesto el poco interés de la autoridad estatal y de la municipal por encabezar no sólo la protección al ambiente, sino el cuidado y la protección de la salud de los habitantes del territorio que dicen gobernar. Lejos de hacerlo, se lavan las manos y evaden la responsabilidad.

Tanto el gobierno de Ricardo Gallardo Cardona como el ayuntamiento de Enrique Galindo Ceballos apuntan hacia el gobierno federal como la autoridad omisa, como si de ellos no fuera la responsabilidad de promover y hasta de exigir que se tomen las medidas necesarias para que sus representados no padezcan los efectos de esa negligencia.

En el caso de la Sierra de Álvarez, en 2018 –con más de 37 años de retraso– el subdirector encargado del ANP, Oscar Flores Sosa, presentó un borrador de un plan de manejo mal elaborado que restringía las actividades de los habitantes de la zona, pero a La Calera no le ponía ninguna restricción.

Incluso yo le pregunté: ¿entonces hasta cuándo van a parar la calera?, y respondió que hasta que ya no tengan material para trabajar. Pues será hasta que se acabe la Sierra de Álvarez porque ahí todo es roca caliza”, expresó Francisco Romero Tristán, integrante de Pro San Luis Ecológico, organización asesora a los vecinos del Grupo Ecológico La Florida.

El 12 de abril de 2019, a cinco días de que se cumplieron 38 años de la declaratoria de ANP para la Sierra de Álvarez, la agrupación Cambio de Ruta entregó al gobernador Juan Manuel Carreras López una petición para que promoviera el plan de manejo, respaldada con 14 mil 54 firmas. El hoy exgobernador ni siquiera se dignó dar una respuesta.

Cuatro años después, con motivo de los 42 años sin que se realice el plan de manejo para la Sierra de Álvarez, nuevamente la agrupación Cambio de Ruta pidió al gobernador, en esta ocasión Ricardo Gallardo Cardona, prácticamente lo mismo, pero con una colecta de firmas vía la plataforma Change.org que rebasó la 50 mil firmas. El hoy gobernador tampoco se ha dignado responder.

En el Estado hay 32 áreas naturales protegidas, de las cuales 19 son estatales. De acuerdo con la información disponible en el portal Web de la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (SEGAM), sólo siete cuentan con un plan de manejo. Las doce restantes dan cuenta de la falta de interés real de las autoridades auto proclamadas ecologistas por hacer efectiva la protección.

Una proclamación de ecologistas con más sentido de promoción mediática que de voluntad real, y un caso lo representa la ANP Joya Honda, sobre la que se anunció el pasado 3 de febrero que ya contaba con plan de manejo y se publicaría en el Periódico Oficial en los siguientes días.

No obstante, en el Periódico Oficial no fue posible localizar esa publicación, ni por la vía de consultas específicas ni con el motor de búsquedas del sitio Web de ese órgano de difusión oficial. Tampoco se reporta y se incluye la publicación en la relación de áreas naturales protegidas de la página de internet de la SEGAM.

Si la Sierra de Álvarez, con un rezago de 42 años en la elaboración del plan de manejo, no fue motivo de atención por parte de Gallardo Cardona tras la petición de más de 50 mil personas, poco se puede esperar que se haga para proteger las más de un millón de hectáreas que abarcan las 32 ANP… Es más fácil pensar que declararlas ANP es una maldición de desprotección y descuido.

Skip to content