Angélica Campillo
El secretario general del Gobierno del Estado, Alejandro Leal Tovías, advirtió que si no se cumplen con las medidas sanitarias y aumenta el número de personas contagiadas por coronavirus en San Luis Potosí, se corre riesgo de regresar a semáforo rojo.
El funcionario estatal refirió que se tuvo una reunión con los directivos de las diferentes organizaciones, incluyendo a la Iglesia, misma que ya informó la suspensión de eventos religiosos. Agregó que se acordó con los integrantes de la cámara de restauranteros que estos establecimientos operarán únicamente hasta las 10 de la noche y tendrán una hora para desalojar.
Comentó que se están retomando las medidas sanitarias en el transporte público, como el uso de cubrebocas, uso de gel antibacterial y la disminución de la capacidad en los mismos.
El secretario general especificó que en semáforo naranja, de riesgo alto de contagio por COVID-19, no pueden operar bares, antros, table dance ni salones de eventos, “no perdamos de vista que es responsabilidad de todos”.
Explicó que todas estas medidas son porque las marca el semáforo naranja, pero si no se cumplen, la entidad potosina regresará a semáforo rojo, donde se tendrá que cancelar y cerrar otro tipo de eventos, sobre todo en diciembre, que son fechas importantes para el comercio y para la actividad económica, “por eso es importante que todo mundo esté muy atento en las medidas que hemos emitido”.
Leal Tovías advirtió que de volver al semáforo rojo, todos los comercios que ya adquirieron sus mercancías, se van a quedar sin comercializar los artículos en los que invirtieron como ropa, zapatos, juguetes, entre otros, ya que deberán permanecer cerrados, “tenemos que hacer un esfuerzo para que no nos suceda eso, porque en semáforo rojo se cierran plazas comerciales, tiendas, cerramos todo y no queremos llegar a eso”.
Dijo que se está haciendo un gran esfuerzo de sensibilización y no están llegando a implementar medidas coercitivas o disciplinarias dentro del bando de policía y buen gobierno. Señaló que el llamado que se está haciendo a Salud, Coepris, y los presidentes municipales es que logren convencer a la ciudadanía que el COVID-19 es un problema delicado de salud.
Destacó que el incremento de casos de coronavirus, los fallecimientos y los pacientes que están llegando a los hospitales de San Luis Potosí contagiados debido a esta enfermedad, no corresponden a estudiantes, a maestros, ni a trabajadores de algún municipio o algún gobierno, ni tampoco a empleados de la Zona Industrial, sino que son producto del relajamiento social “y es donde tenemos que apretar”.
