Por Victoriano Martínez
A tres días de la votación sobre la municipalización de la Delegación de Villa de Pozos, todo está listo para el plebiscito, salvo los principales protagonistas: los habitantes del municipio de San Luis Potosí con credencial de elector, a quienes el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (CEEPAC) dejó sin información para normar su criterio y poder decidir por el sí o por el no.
¿Cuántos de los 669 mil 525 ciudadanos con derecho a participar podrán salir de la mesa receptora de opinión el domingo y argumentar una justificación de su determinación con un balance de pros y contras que represente que emitió un voto verdaderamente razonado?
Lo más seguro ni los 27 diputados que votaron el 15 de junio dar trámite a la solicitud de municipalización sin siquiera verificar las firmas, lo puedan hacer.
Es más, seguramente que ni los siete consejeros electorales que tuvieron a cargo la organización logística para recibir las opiniones lo puedan hacer. Esa es la calidad que tendrá el ejercicio democrático que por primera vez en la historia se aplicará en San Luis Potosí.
Ahora que si alguno de los consejeros electorales, o los siete, pudieran justificar con información precisa de pros y contras la determinación que le piden emitir a los habitantes del municipio capitalino, se trataría de un atentado más al derecho de la ciudadanía a contar con información para atender la convocatoria al plebiscito.
Sería tanto como confesar que le negaron información con la que sí contaron, pero omitieron hacerla llegar a los electores.
¿Cuál sería mayor atentado contra la calidad de la democracia plebiscitaria? ¿Haber dejado sin información a la ciudadanía para una participación razonada por negligencia, o haberlo hecho por falta de voluntad?
Las dos instancias, Congreso del Estado y CEEPAC, podrán afirmar que fluyó mucha información sobre el plebiscito en los últimos tres meses y hasta un apartado en sus respectivos sitios Web pusieron al servicio de la ciudadanía, pero su contenido poco acredita haberse esforzado por proporcionar la información pertinente a la población.
Prácticamente el contenido de los dos sitios aporta la misma información, al grado de que en el caso del Congreso del Estado incluye el acceso a una carpeta ZIP con el material gráfico elaborado por el CEEPAC para promover el plebiscito, no la información necesaria para contar con elementos para participar en el plebiscito.
Tanta es la preocupación por la forma antes que, por el contenido, que en uno de los tres spots incluidos en el material gráfico se preguntan “¿cómo puedo participar?”.
La respuesta es: “en la capacitación electoral, en las mesas receptoras de opinión, en la observación de este ejercicio”, y sólo hasta el final agregan “y sobre todo expresando tu opinión como habitante del municipio de San Luis Potosí”.
El spot cierra con una invitación. “Consulta todas las convocatorias y forma parte de este evento histórico”, una expresión que se acompaña con la imagen de las carátulas de las convocatorias para ser funcionario de mesa receptora de opinión, capacitador u observador, como si no existiera la convocatoria al plebiscito.
En el caso de la información publicada por el Congreso del Estado destacan las opiniones de los tres municipios vecinos de Villa de Pozos: Cerro de San Pedro, Soledad de Graciano Sánchez y Zaragoza.
Los tres informan de sesiones de Cabildo en las que se manifestaron de acuerdo con el nuevo municipio y sólo Cerro de San Pedro solicitó ajustes sobre el polígono para no ver afectado su territorio.
No aparece la opinión del Cabildo de San Luis Potosí, sólo información estadística proporcionada por la Secretaría General del Ayuntamiento de manera dispersa en diversos oficios, sin ningún elemento de contraste que pudiera indicar pros y contras de la municipalización de Villa de Pozos.
En el caso de la opinión del titular del Poder Ejecutivo estatal, el planteamiento central se resume en que el gobierno estatal está en condiciones de asumir la totalidad de los servicios del nuevo municipio y las funciones relacionadas con la administración de las contribuciones, y que los bienes muebles e inmuebles de la Delegación deberán ser transferidos en automático al nuevo municipio.
Todo está listo, pues, para el plebiscito. Si hay o no opinión razonada resulta irrelevante porque todo está dispuesto hasta para que el gobierno estatal asumo el control del municipio 59… con la autorización del Congreso del Estado.