Ciudad de México (27 de noviembre).- Leonardo Augustos Patterson, uno de los mayores traficantes de piezas arqueológicas en el mundo, fue sentenciado en Alemania a un año y tres meses de prisión por vender, a un ciudadano de ese país, una réplica de una cabeza colosal Olmeca, que hizo pasar como original.
Patterson, de origen costarricense y naturalizado alemán, ha enfrentado varias veces a la justicia de diversos países de Latinoamérica por el robo de bienes culturales, entre ellos, Guatemala y Perú.
Para lograr la sentencia condenatoria en este caso las autoridades colaboraron con La Procuraduría General de la República (PGR), el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Hace casi 20 años, en 1997, Patterson presentó en Santiago de Compostela España, una exposición con piezas de origen prehispánico originarias de varios países latinoamericanos llamada La Cultura en el Tiempo. América Prehispánica.
Pero en 2007, el INAH obtuvo el catálogo de dicha exposición, en el cual, tras un primer análisis de los expertos de la institución, se encontraron piezas arqueológicas pertenecientes al patrimonio nacional.
Por lo que la PGR inició una investigación para tratar de recuperar las piezas arqueológicas que se habían detectado en el dictamen realizado el 14 de septiembre del 2007.
Dentro del mismo proceso, el INAH solicitó a la SRE iniciar un proceso diplomático ante España para obtener la devolución de los bienes arqueológicos, que ya se encontraban en una bodega de Santiago de Compostela.
Sin embargo, Patterson trasladó de manera clandestina e ilícita la colección a Munich, Alemania, donde fue asegurada por autoridades a solicitud de México. Las piezas están resguardadas ahí.
Entre el 1 y 20 de marzo de 2010, especialistas mexicanos se trasladaron a Alemania para inspeccionar físicamente la colección y corroborar el peritaje rendido inicialmente.
Los expertos determinaron que del total de mil 29 objetos que se atribuían a culturas prehispánicas, 691 forman parte del patrimonio arqueológico mexicano: 252 son objetos de reciente manufactura y 86 piezas corresponden a culturas de Centroamérica.
Entre las piezas analizadas está una cabeza colosal olmeca, la cual se determinó es de reciente creación. La pieza antropomorfa, elaborada en basalto mide 97x70x55 centímetros, fue vendida por Patterson de manera fraudulenta a un ciudadano alemán, como un monumento arqueológico de origen mexicano, motivo por el cual el Ministerio Público alemán inició una investigación penal en su contra y lo sentenció a pasar un poco más de un año en la cárcel debido a su avanzada edad.
En un comunicado, el INAH señaló que realizará gestiones ante las autoridades alemanas para recuperar las piezas de la colección de Patterson que continúan en ese país europeo.