Por Victoriano Martínez
“El transporte rosa en San Luis ya es una realidad”, afirma el Gobierno del Estado en un video promocional de un minuto difundido en las redes sociales de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, la dependencia legalmente responsable de ponerlo en marcha.
Desde el pasado sábado debieron comenzar a circular las unidades exclusivas para mujeres y los menores que las acompañen, y para adultos mayores.
Desde el pasado sábado el transporte rosa es, efectivamente, una realidad, pero con la característica de la mayoría de las que suele presumir el gobierno de Juan Manuel Carreras López: una realidad aparentada.
Por mucho que la SCT afirme en un flyer que difunde en su cuenta de Twitter que se trata de “un transporte público exclusivo que ofrece seguridad, rapidez y eficiencia a las usuarias”, lo cierto es que está muy lejos de apegarse a lo que se incorporó a la Ley de Transporte Público el pasado 7 de marzo.
“En todas las rutas deberán operar durante las horas pico de servicio, vehículos de uso exclusivo para mujeres y los menores de edad que las acompañen, así como para personas de la tercera edad, en número suficiente para atender la demanda de acuerdo con los estándares de ocupación a que se refiere el artículo 21 de este Ordenamiento”, dice el primer párrafo del inciso e de la fracción II del artículo 67 de la Ley.
Un recorrido realizado por Leticia Vaca a las paradas de los camiones, reveló que la realidad del transporte rosa está muy lejos de ofrecer el número suficiente de unidades para atender la demanda de acuerdo a los estándares de ocupación establecidos por la propia ley.
“Será responsabilidad de la Secretaría determinar en cada ruta los horarios, la frecuencia y la forma en que se han de identificar de manera clara los vehículos en los que se preste ese servicio exclusivo. La programación y sus modificaciones, deberán ser publicadas por la Secretaría en su página de internet, y fijarlos además en todos los centros de emisión y recarga de tarjeta de prepago”, dice el segundo párrafo de la misma disposición.
Si bien se colocaron pancartas distintivas a algunas unidades en las que se establecen horarios, en el recorrido realizado por la reportera de Astrolabio Diario Digital se encontró con que en uno de esos periodos no pasó una sola unidad del transporte rosa. Y eso que en el video promocional se afirma que “circularán durante todo el día”.
Una situación que incumple además el inciso a de la fracción I del mismo artículo 67 de la Ley que dice: “Las frecuencias serán establecidas por la Secretaría en función de la programación del servicio para cada ruta o sistema de rutas, y tomando en cuenta que se cumplan itinerarios suficientes por los vehículos exclusivos para mujeres y los menores de edad que las acompañen, así como para personas de la tercera edad”.
En el sitio Web de la SCT sólo aparece un comunicado sobre el inicio del transporte rosa, pero entre los ocho avisos de su slide principal, ni en ningún otro banner, es posible localizar acceso alguno para consultar la programación y sus modificaciones, como prevé la ley.
En un minuto, con su video promocional, el Gobierno del Estado describe una realidad rosa del transporte rosa que incluye afirmaciones que pretenden describir un trabajo tan cuidado, que el servicio no puede ser más que considerado muy confiable.
“Otra buena noticia es que las personas que operen estas unidades serán seleccionadas y serán capacitadas para que apoyen en la protección de la integridad y seguridad de las niñas y las mujeres”, se asegura en el video.
Leticia Vaca se encontró con una realidad muy distinta: “a mí nada más me pusieron las calcomanías, pero a mí no me han dicho nada, yo le pregunté a los de Comunicaciones y me dijeron que todavía no arrancaba, que iba a empezar en 15 días”, fue la respuesta de un chofer.
Ni seleccionado ni capacitados, y sin saber nada. “A mí ni de Comunicaciones y Transportes ni mi patrón me ha dicho nada de eso, yo sigo subiendo normal”, agregó.
Un trasporte rosa para dar protección a las mujeres principalmente, pero que en su puesta en operación parece seguir los pasos de otra acción sin resultados: la alerta de violencia de género que, dentro de tres viernes, cumplirá su segundo aniversario.
Un testimonio y una constatación de la operación en las paradas del camión que confirman que el transporte rosa es ya una realidad… al estilo del gobierno de Juan Manuel Carreras López.