Por: Victoriano Martínez.
Si para la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, la transparencia es –como acaba de declarar el rector Manuel Fermín Villar Rubio– un asunto que alguien puede usar para atacar a la Máxima Casa de Estudios, atender a las obligaciones que marca la ley en esa materia necesariamente tiene que convertirse en una trinchera defensiva.
Al menos así le puede quedar claro a cualquier persona que intente acceder a la información pública que la UASLP debe difundir de oficio a través de su portal Web, donde un vistoso y aparente funcional buscador de los documentos que la ley marca deben hacerse públicos presenta una relación de opciones a consultar… pero sin vínculos.
Así, seleccionar en el buscador la opción Artículo 19, Frac. VI, año 2015, arroja una lista de 16 actas de sesiones del Consejo Directivo Universitario encabezada por el Manual de Organización. No obstante, al intentar visualizar cualquiera de esos 17 documentos lo más que puede ocurrir es un pestañeo en la pantalla.
La razón: al posicionar el cursor sobre cada una de esas 17 opciones es posible observar la dirección a la que envía el vínculo… y resulta ser la misma en la que ya se encuentra en usuario del portal Web.
Una buena trinchera defensiva para que cualquier –otra vez como acaba de declarar el rector Manuel Fermín Villar Rubio– abusivo del derecho de acceso a la información pública que busca atacar a la UASLP no logre sus insanas intenciones.
Pero el blindaje no para ahí. Si uno de esos perjudiciales personajes a los que se les ocurre ejercer un derecho intenta su ataque por la vía de la presentación de una solicitud de información, se ha habilitado un formulario para que haga su intento… y se lleve una sorpresa.
Después de ingresar su nombre, nacionalidad, dirección, colonia, Código Postal, país, estado, ciudad, identificación (IFE, pasaporte, licencia, cartilla, RPE, clave única, DNI u otra, con su número incluído), teléfono (con lada incluida), correo electrónico y datos que solicita, el sistema arroja una advertencia al impertinente peticionario: No se puede enviar el formulario debido a un error.
Por más que se trate de identificar el presunto error, el formulario jamás dará cuenta de que la petición se envió con éxito. Simplemente en todos los casos, la advertencia reaparecerá una y otra vez, para que al usuario le quede claro lo siguiente:
“Advertencia
“No se puede enviar el formulario debido a un error.
“Haga clic en Aceptar para continuar rellenando el formulario. Puede que desee comprobar posibles errores en los datos del formulario.
“OCULTAR DETALLES DEL ERROR
“Error al usar el formulario. Para obtener más información, póngase en contacto con el administrador del sitio.
“Se ha agregado una entrada al registro de eventos de Windows del servidor.
“Id. de registro:5567
“Id. de correlación:e7e08c9d-bfae-a059-6a90-b31febc74584”.
Si aquel que intenta ejercer su derecho de acceso a la información pública –que siendo pública no tendría por qué representar riesgo alguno para la UASLP, pero para Villar Rubio el principio de publicidad es un riesgo–, después de la experiencia frustrante del portal Web universitario aún le quedan ánimos para insistir, desde el 24 de mayo se abrió una opción: Infomex.
Sí, tras negarse a incorporarse al sistema electrónico de solicitudes de información al grado de llegar a ampararse contra las determinaciones de la CEGAIP en ese sentido, finalmente la UASLP se incorporó al sistema y, al menos por esa vía, una solicitud de información dirigida a la UASLP sí arroja un acuse de recibo.
Ahora a lo que habrá que poner atención es a la forma en que en las respuestas que dé, la UASLP muestra la forma en que se blinda contra lo que Villar Rubio advierte que la institución “no va a satisfacer exageraciones de peticiones”.