Texto y fotografías de María Ruiz
Habitantes de la colonia Constituyentes bloquearon carriles de la avenida Salvador Nava y se manifestaron frente a la Unidad Administrativa Municipal (UAM) durante la mañana de este jueves para exigir una solución al colapso del sistema de drenaje que afecta sus viviendas.
Con pancartas y reclamos, los vecinos señalaron que el problema lleva meses agravándose y hasta el momento las autoridades municipales y el Interapas no han brindado una respuesta efectiva.
Ana María Puente, integrante del consejo vecinal de Circuito Mariano Medina, explicó que desde hace cuatro meses comenzaron a aparecer hundimientos en la zona. Sin embargo, el problema se intensificó con las últimas lluvias, ya que el drenaje colapsado por completo ahora provoca que aguas negras broten de las alcantarillas y se filtren dentro de las casas.
“El olor es insoportable, no podemos abrir las ventanas, la pestilencia es terrible, y lo peor, es un riesgo de salud para todos nosotros”, declaró.
La situación se ha vuelto una crisis sanitaria para los vecinos. Algunos han reportado infecciones en la piel y los ojos, dengue y enfermedades gastrointestinales, que afectan no solo a los adultos mayores sino también a niños y mascotas.
“Mi hijo contrajo dengue; mi vecina, una maestra de 70 años, tiene una fuerte infección en los ojos. Incluso nuestros perros han enfermado por el contacto con estas aguas sucias”, añadió la señora Puente.
Los manifestantes indicaron que este problema no es nuevo. Desde hace más de tres años los colapsos en el sistema de drenaje han sido constantes, y aunque el Interapas realiza reparaciones temporales en tramos específicos, son insuficientes.
Según los vecinos, el Interapas ha declarado colapsado todo el sistema, pero argumenta que no cuenta con presupuesto para una solución integral.
“Nos han dicho que no hay dinero, que no pueden hacer nada, pero no es posible que una colonia de más de 40 años, habitada en su mayoría por personas adultas, esté en estas condiciones”, reclamó Puente.
Los residentes también mencionaron que la situación es crítica en términos de infraestructura, ya que la humedad ha comenzado a dañar las viviendas. Algunas paredes presentan desprendimientos, y la constante filtración de aguas residuales amenaza la estabilidad de los inmuebles.
A pesar de que autoridades y senadores locales les han prometido apoyo y la llegada de maquinaria para arreglar el sistema, los vecinos aseguran que hasta el momento las palabras no se han traducido en acciones concretas.
“No nos moveremos hasta obtener una solución definitiva. Hemos dado vueltas entre dependencias sin recibir respuesta, y ya no estamos dispuestos a aceptar excusas. Queremos vivir en un ambiente sano y seguro”, concluyó, mientras los manifestantes se comprometían a mantener su presencia hasta ser escuchados.