Antonio González Vázquez
La violencia familiar en San Luis Potosí es un fenómeno que ninguna autoridad ha sido capaz de contener: en el período enero-mayo del año en curso, en promedio, se presentaron 25.80 denuncias cada 24 horas.
Se trata de un delito que en la entidad viene presentando una constancia creciente, de manera más preocupante en los municipios de la capital y Soledad de Graciano Sánchez, donde se concentra hasta el 60 por ciento del total de denuncias ante la Fiscalía General del Estado.
Semáforo Delictivo ha encendido focos rojos en ambos municipios en cada mes entre enero y mayo.
Para el mes pasado, la capital tuvo 409 incidentes y Soledad de Graciano Sánchez, 172, lo que sumó 581 casos del total estatal de 919.
El Centro Nacional de Información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, contabilizó de enero a mayo, 4 mil 070 delitos contra la familia, de los cuales, 3 mil 871 se refieren a hechos violentos en los hogares y 197 corresponden al incumplimiento de obligaciones de asistencia familiar.
Mayo pasado fue el mes con más denuncias por delitos contra la familia con 975 casos, de estos, 919 son por violencia familiar y 56 por incumplimiento de obligaciones de asistencia social.
Es tan grave el fenómeno que durante mayo, se iniciaron 29.64 carpetas de investigación diariamente.
El Código Penal define la violencia familiar como: “comete el delito de violencia familiar quien lleve a cabo actos o conductas de dominio, control o agresión física, psicológica, patrimonial o económica, a alguna persona con la que se encuentre o haya estado unida por vínculo matrimonial, de parentesco por consaguinidad, afinidad o civil, concubinato, o una relación de pareja dentro o fuera del domicilio familiar”.
La violencia familiar encuentra su expresión extrema en el homicidio, como ocurrió el pasado día 20 de junio en la colonia Las Mercedes, municipio de la capital, cuando como corolario de un desencuentro familiar, un joven de 20 años de edad dio muerte a su propia madre y a uno de sus hermanos.
Gobierno del Estado, así como los Ayuntamientos, a través del Sistema Integral para el Desarrollo de la Familia cuentan con instancias para prevenir la violencia, pero las estadísticas revelan que en los hechos no han sido muy útiles en el objetivo de proteger a la familia.