Angélica Campillo
El pasado jueves 1 de septiembre por la tarde, funcionarios del DIF estatal, entre ellos la directora Virginia Zúñiga Maldonado, tuvieron un informal acercamiento con los manifestantes del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Gobierno del Estado (SUTSGE), y tras escuchar sus inconformidades, prometieron que regresarían tres horas después para dar respuesta a sus inquietudes, sin embargo, hasta el momento esto no ha ocurrido.
Al exterior del edificio del DIF Estatal, además de Zúñiga Maldonado, se presentaron ante los manifestantes la directora de Planeación y Recursos Financieros, Verónica Pérez Tovar, y Julio Cesar Martinez Vázquez, director de Asuntos Jurídicos, quienes escucharon los problemas laborales de los trabajadores.
Por su parte, los directivos del DIF les aseguraron que tres horas más tarde se comunicarían con ellos para dar respuesta, situación que hasta las tres de la tarde de este viernes 2 de septiembre no había sucedido.
Las y los trabajadores del SUTSGE aseveraron que la vía publica no se acerca para nada a un escenario propio para tratar asuntos que atañen a la administración gubernamental.
De acuerdo con los agremiados del SUTSGE, son varios los mecanismos que el DIF estatal ha ido implementado para reprimir la manifestación, como el intento de fumigar el edificio para evitar que los inconformes permanecieran en la recepción; se desinstalaron dos relojes checadores de la pared, en los que las y los trabajadores de la institución registran sus entradas y salidas de las jornadas laborales, con el fin de que los empleados no tuvieran contacto alguno con los manifestantes del SUTSGE.
Los manifestantes acusaron que instalaron doble chapa y cadena a las puertas del edificio de Gobierno, y este viernes personal de herrería instaló una puerta en la escalera que conduce a las oficinas, a fin de que los manifestantes ya no suban para solicitar audiencia; además, expusieron que el día de hoy, personal del DIF instó a las y los trabajadores a que checaran su salida antes de las tres de la tarde, cuando su horario es precisamente hasta esa hora, además de advertirles que no se quedaran en el plantón del SUTSGE.
“¿A esta reestructuración se refieren los funcionarios? ¿Esta es la forma de mostrar disposición y voluntad para atender los asuntos laborales de sus trabajadores? ¿Este es el gobierno de puertas abiertas?”, se cuestionaron las y los trabajadores sindicalizados.
Aseveraron que las y los directivos del DIF estatal siguen enfrascados en la cerrazón, no hay apertura al diálogo para resolver los conflictos laborales que ellos mismos han generado, y tampoco la posibilidad de otorgar el derecho de audiencia que todo funcionario está obligado a dar.