Desiree Madrid
Un juez de control vinculó a proceso y dictó prisión preventiva justificada contra Marco N., Eusebio N. y Juan N. por la muerte de la perrita Hope, agredida el 8 de abril en la colonia Prados de San Vicente, San Luis Potosí.
La Fiscalía General del Estado los capturó tras reunir testimonios, videos y dictámenes veterinarios que acreditan que la golpearon y le arrojaron agua hirviendo; la canina murió 48 horas después pese a la atención médica recibida.
Durante la audiencia del 22 de abril, el Ministerio Público presentó los indicios y el juez otorgó un mes para la investigación complementaria. Los tres imputados permanecerán en el Centro de Reinserción Social de La Pila, al estimarse riesgo de fuga y de presión a testigos.
El delito de maltrato animal, previsto en el artículo 317 bis del Código Penal del Estado, contempla penas de hasta cuatro años de prisión y multas de 200 a 400 Unidades de Medida y Actualización (UMA), que pueden aumentar cuando se acredita crueldad extrema.
Hope fue encontrada en la avenida Salk con quemaduras y heridas severas antes de ser trasladada de urgencia a una clínica veterinaria, donde finalmente falleció.
En respuesta, decenas de personas y colectivos animalistas marcharon por el Centro Histórico de la ciudad; la concentración se conjuntó en la Plaza de los Fundadores con pancartas y fotografías de la perrita, así como la difusión de más casos donde la impunidad al maltrato animal quedó visible. Hope fue convertida en emblema de la lucha contra la violencia hacia los animales.
La presión social llegó al Congreso del Estado, pues durante la sesión ordinaria del 14 de abril, activistas exigieron a las y los diputados incrementar las sanciones por maltrato animal y fortalecer los mecanismos de prevención.