Leticia Vaca
El diputado José Antonio Zapata Meraz, vicepresidente de la Comisión del Agua, presentó una iniciativa con la que busca que en el Presupuesto de Egresos de 2020 se considere un aumento de 10 por ciento respecto al monto anterior a la partida destinada a Ordenación de Aguas Residuales, Drenaje y Alcantarillado, y de igual forma un incremento de 15 por ciento a la partida de Abastecimiento de Agua.
De ser aprobada, el Interapas contaría con 52 millones 230 mil 182 pesos (para 2019 se asignaron 47 millones 481 mil 985 pesos).
Respecto a la partida de abastecimiento de agua, el organismo recibió mil 50 millones 727 mil 569 pesos, por lo que en 2020 subiría a mil 208 millones 336 mil 704 pesos.
Ambas iniciativas se realizaron con el propósito de que la inversión en estos rubros aumente, “y de esa manera sea posible seguir sumando esfuerzos para garantizar el acceso de agua y el saneamiento para los potosinos, mediante el mantenimiento de la infraestructura”.
En la exposición de motivos se indica que el Interapas atiende al 97 por ciento de la población de los municipios de San Luis Potosí, Soledad y Cerro de San Pedro, “lo que de acuerdo a las cifras de población municipal del Inegi para el 2015, equivaldría a más de un millón de habitantes entre los tres municipios”.
Por lo tanto, las condiciones de la infraestructura del servicio de agua constituyen un verdadero problema público, ya que limitan el acceso al líquido a una parte de la población de la zona conurbada, y potabilizar y bombear agua que no llega al usuario constituye un serio obstáculo para la eficiencia del gasto.
“El drenaje es otro aspecto vulnerable de la infraestructura de agua; como resulta notorio, el sistema en muchos casos se encuentra sobrepasado para canalizar el agua de lluvias, debido a su antigüedad en varios tramos, a colapsos, y a otros problemas”.
Como ejemplo de lo expuesto, se cita que tan sólo en los primeros siete meses de este año se han atendido dos mil 941 reportes relacionados con el drenaje en la zona conurbada. “Las afectaciones públicas del estado actual del saneamiento son claras: problemas viales, deterioro a viviendas y a obra pública, y se podrían derivar incluso problemas de salud”, finalizó.